A las 6.30 horas de la manyana recogemos la moto. La primera parte del dia va muy bien. La carretera esta asfaltada, los paisajes son hermosos. No paramos a visitar las cuevas porque ya las hicimos anteayer. Sobre las 10 la carretera deja de ser asfaltada y pasa a ser de piedras. Nos dicen que son unos 50 km hasta Lak Sao. A las 13 horas, los radios de la rueda trasera se rompen, con lo cual la moto se hace inconducible. Cae un sol a plomo. Estamos en medio de la montanya y no pasa nadie, asi que arrastramos la moto esperando que pase alguien o lleguemos a alguna aldea. Al cabo de una hora, llegamos a un cruce donce hay un mecanico, pero no nos puede ayudar porque no tiene radios ni ruedas nuevas, asi que nos aconseja coger el bus hasta Lak Sao. Esperamos dos horas, y el bus brilla por su ausencia. Finalmente paramos una furgoneta y le suplicamos que nos lleve a Lak Sao o a un taller. El buen hombre se compadece de nosotros. Cargamos la moto en la parte de atras de la furgoneta y como no tenemos cuerdas para sujetarla, tengo que montarme encima de ella; toda una experiencia! Nos deja en un taller donde nos cambian la rueda en media hora y aprovechamos para comernos una sopa de fideos. El cambio de rueda nos resulta mas economico de lo que esperabamos. Toda la experienca nos lleva 5 horas, durante las cuales en "ningun' momento invocamos a los buenos espiritus ni a ningun Dios: romper la rueda trasera en medio de la montanya y de la nada no es razon para ello...
Al llegar a Lak Sao, llenamos el deposito, encontramos habitacion y nos damos una copiosa cena, incluyendo una sandia entera. Que buenas y refrescantes son!!!
