viernes, 30 de septiembre de 2016

15/09/2016 Traslado a Antananarivo y vuelta a casa

Hoy no hemos dormido casi nada... ¿Serán los nervios por la vuelta? Salimos a desayunar y preparamos las mochilas y aunque nuestro avión no sale hasta las 16 horas, a las 9:30 ya abandonamos nuestro hotel en busca del taxi-brousse que nos ha de llevar al aeropuerto. Como es el mismo que cogimos ayer para ir al mercado, vamos rapiditos a la parada y por el camino encontramos un mercado de souvenirs que ayer no vimos. Entramos a chafardear y a ver si podemos comprar alguna cosa más con el dinero sobrante, pero los precios son abusivos y no tenemos ganas de perder más tiempo. Llegamos sin contratiempos a la parada del taxi-B y afortunadamente, podemos apoderarnos de los asientos de al lado del conductor, ya que cargados como vamos, no hubiesemos podido acomodarnos en la parte de atrás. El trayecto, que es de 17 km, dura más de 2 horas, pero como hemos salido con tiempo de sobra, no nos preocupamos. Sobre las 12 estamos en el aeropuerto y decidimos hacer nuestra última comida en el país. Elegimos el restaurante más chulo de los que hay en la zona y nos pedimos unos platos que sobre la carta parecen muy apetitosos, aconsejados por unas azafatas que están comiendo allí y como no, nuestra última coca-cola fresquita, a la que nos hemos vuelto adictos.
Por desgracia nuestra, la comida no está a la altura de lo que esperábamos y ni la BM ni yo nos acabamos el plato....
Pero ya comidos, llega la hora de hacer los últimos trámites para abandonar el país. Cambiamos el resto del dinero sobrante, nos ponemos la ropa de abrigo para el largo trayecto y nos dirigimos al mostrador de facturación, donde dejamos nuestras mochilas y nos preparamos para las largas horas que vienen a continuación.
Con muchísima pena, abandonamos Madagascar después de un viaje mágico de 11 semanas, habiendo disfrutado lo indecible de este maravilloso país y sus gentes y agradecidos por la experiencia vivida, que ha elevado Madagascar a la posición 1 de nuestra lista de países favoritos, de todos los visitados hasta el momento.
 
En el aeropuerto, preparados (?) para volver a casa
 

14/09/2016 Antananarivo


Hoy es nuestro último día antes de coger el avión, así que seguimos con los madrugones. Preparamos las mochilas y las dejamos en la recepción del que va a ser nuestro hotel esta última noche y después de desayunar, vamos a la búsqueda del bus a Ivato, que es la ciudad donde está el aeropuerto y en cuya carretera, según la oficina de Turismo, tenemos uno de los mercados de souvenirs más grandes de Tana.

La única pega, es que también es el de los más caros, gracias a los turistas que vienen en bus y guía. Aquí nos pasamos toda la mañana y yo termino de los nervios, los precios son abusivos, los vendedores pesados y algunos maleducados... Pero de tanto en tanto les hacemos la misma técnica que ellos y lo curioso que terminan enfadándose con nosotros por los precios dados.

Pero finalmente, tras muchas negociaciones y rifirafes nos hacemos con casi todo lo que queríamos.

De regreso a Tana, terminamos de comprar lo que queremos, cambiamos todo el dinero restante dejándonos sólo lo que creemos necesitar y sin más fuerzas (por culpa de los vendedores) nos tomamos nuestra Coca cola para darle un poco de energía al cuerpo.... Regresamos a nuestro hotel, donde nos quitamos todas las impurezas debajo la ducha, nos ponemos guapos y nos subimos a la terraza, a disfrutar de otra Coca-cola (hoy nos la merecemos) e intentar actualitzar el blog y hablar con la familia, para después irnos a nuestra bonita habitación y disfrutar de la última noche en el país.

13/09/2016 De Andasibe a Tana (Antananarivo)


Nos despertamos a las 6, hoy regresamos a la capital. Ya estamos pegando los últimos coletazos.... Preparamos las mochilas y sólo salir, vemos pasar un taxi-brousse, pero decidimos ir con calma. Desayunamos en nuestro puesto habitual y al acabar somos tan afortunados que sale otro traxi-brousse. Ingenuamente, pensamos que llegaremos a Moramanga en un plis-plas y así hubiese sido si el conductor no hubiese parado en un cruce durante prácticamente una hora para esperar a una pasajera. Estamos todos calentitos y el último tramo lo hace diligentemente. Una vez en Moramanga, paramos en una estación diferente a la que habíamos parado a la ida, por lo que nos cuesta un poco ubicarnos. Tenemos a los vendedores de billetes que no nos dejan en paz. Nos ofrecen el billete por 7.000 AR y aunque intentamos que nos hagan un descuento, nadie accede, por lo que al final pagamos y sin más, salimos hacia Tana. Esta parte del trayecto la hacemos sin incidentes y disfrutando de las maravillosas vistas. Una vez en Tana, averiguamos como llegar al centro en bus local y tras algunas indicaciones contradictorias, conseguimos encontrar al bus que nos deja en el mismo centro. Vamos al hotel donde queremos alojarnos, pero desafortunadamente, está lleno, así que la BM sale a buscar otra guarida y vuelve con una habitación en el hotel de al lado. Como nos hace ilusión pasar al menos una noche en el hotel Moonlight, reservamos habitación para mañana y nos vamos al hotel que ha encontrado la BM, sencillo y viejo, pero limpio.

Como aún queda algo de sol, salimos a pasear y hacer las últimas gestiones: cambiar dinero sobrante (sí, todavía nos ha sobrado más y el cambio en el aeropuerto no es muy bueno), buscar información de como llegar al aeropuerto en transporte público y donde hacer las últimas compras. En la oficina de Turismo nos resuelven muy bien las dos últimas cuestiones y como ya hemos hecho los deberes, nos vamos al hotel Moonlight, donde hay internet a tomarnos la Coca-cola y dar señales de vida a la familia.

Cena, retirada a la habitación y ducha sorprendentemente buena....
Arroz cantonés y espaghettis a la carbonara

12/09/2016 Reserva Mitsinjo. Andisabe

Nos levantamos con los cantos de los gallos, nos vestimos y alicatamos y en un tiempo récord estamos desayunando. Hoy es día de relax y como tal nos pasamos el día caminando por la misma carretera que ayer por la noche, la caminata de ir carretera arriba y carretera abajo da sus frutos, terminamos viendo Indris en lo alto de los árboles mientras gritan como posesos, lémures que bajan hasta la carretera y los podemos fotografiar durante un buen rato, un camaleón en lo alto de un árbol que generosamente nos enseña una familia y un extraño lagarto, muy difícil de encontrar, que un guía nos muestra.
Durante la caminata nos encontramos con una pareja de ingleses con los cuales compartimos ubicación del lagarto y del camaleón, resultando que el chico resulta ser un potentoso de la fauna, explicandonos todo tipo de detalles que no entendemos sobre los animales, y como quien no quiere la cosa nos termina proponiendo hacer el trekking nocturno con ellos esta noche, ellos ya lo hicieron ayer por la noche y vieron muchos animales, como nos han caido bien y parece muy interesante decidimos aceptar la oferta, quedamos a las 18h en la puerta de la reserva Mitsinjo. Caminamos un poco más por la carretera pero ya estamos cansados por lo que decidimos ir a comer, y después a la guesthouse a ducharnos y cambiarnos, descansamos un rato y a la hora indicada estamos en el lugar indicado.
Nos sorprende saber que ellos acampan en la reserva, con la humedad que hace y los animales sueltos que hay yo no podría pegar ojo en toda la noche. La pareja de ingleses aún tienen que cenar y para postre el guía contratada nos a dejado por otro grupo más numeroso. Al final el inglés termina encontrando un guía y a un americano que se une al grupo.
Sólo empezar vemos una de las especies de camaleones más pequeñas del mundo, no entendemos como el guía ha podido verlo, pero es increíble poderlo ver, con tan poca luz no conseguimos hacer ni una buena foto en condiciones por lo que dejamos la cámara y disfrutamos del animalillo. Después del camaleón encontramos varias ranas de diferentes especies...Ls B.M vislumbra una mariposa en la oscuridad, el guía encuentra otra especie de camaleón también enano. También vemos una boa en lo alto de un árbol, y al terminar el trekking por el bosque y volviendo por la carretera, el guía encuentra un lemur nocturno que todavía no habíamos visto. Antes de terminar el trekking vemos a una cría de cameleón Parson y terminamos el trekking donde empezamos. Llegamos a la guesthouse sobre las 22h y satisfechos, nos vamos a dormir.
 
Repetimos desayuno
 
Hacia donde va el humo??
   
Entrada a la reserva
 

 
Lémur andando tranquilamente al lado de la carretera
  
 
Nuestra comida
 

11/09/2016 Reserva VOIMMAR. Andasibe

Antes de las 6 de la mañana, la BM sale a buscar un nuevo alojamiento, ya que durante la noche se oía música de fondo. A las 6:30 ya ha reservado una habitación, por lo que recogemos todo y con mucha pena (la habitación me gustaba mucho) nos mudamos, no sin antes desayunar. La nueva habitación que ha encontrado la BM es también muy chula.
A las 8 estamos en la puerta de la reserva, esperando a la japonesa. LA BM entonces se da cuenta que no hemos cogido los prismáticos que llevamos en la mochila todo el viaje y que no han salido ni una sola vez, así que vuelve a la guest house a buscarlos y regresa con la japonesa. Nuestra guía nos hace pasar por taquilla y después entramos en la reserva, donde empieza a llover (claro, por eso le llaman bosque lluvioso). Empezamos a andar y pasamos por donde se supone que hay una familia de indris, pero no vemos ni uno. Seguimos andando y cuando pasamos por el territorio de otra familia de indris, los vemos!!! Escuchamos sus gritos por todas partes, es una familia de 6 miembros. Los tenemos bastante cerca, pero como el bosque es muy espeso y llueve, cuesta poder hacer fotos. Lo intentamos durante un rato, y como vemos que no va a salir ni una buena, decidimos disfrutar de las vistas de estos fantástico animales. Los indris son los lemures más grandes que existen y sus gritos se pueden oír a 3 km de distancia. Tienen 3 tipos de gritos: el de agrupamiento, el de peligro y el de cortejo. Como la BM ha insistido tanto, la guía nos deja con los indris y sale a buscar un camaleón Parson, el más grande de Madagascar, vuelve al cabo de un rato con buenas noticias y sin más demora nos lleva al área donde habita, nos deja más de un minuto para encontrarlo, pero pasado el tiempo reglamentario y el de propina nos damos por vencidos y termina enseñándonoslo, una vez lo vemos no entendemos como no lo hemos visto antes y empezamos la sesión de fotos, lo fotografiamos por todos los angulos y una vez satisfechos nos dedicamos a disfrutarlo. Cuando nos damos por satisfechos seguimos la visita, pero la lluvia se ha intensificado y los indris se ven de lejos y digo ver porque tengo mucha imaginación.
Como todavía nos queda una hora seguimos con nuestro trekking y afortunados nosotros que volvemos a ver a otro camaleón, este tampoco se libra de la sesión fotográfica y del disfrute de la contemplación.
Sin más cosas interesantes que ver, o al menos nosotros apreciar terminamos el trekking a la hora prevista.
Tantas emociones nos a abierto el estomago de par en par, así sin dudarlo caminamos hasta el pueblo a llenar el deposito. Tras la copiosa y insulsa comida regresamos a nuestra guesthouse para darnos una buena ducha, pero antes conocemos a una pareja de holandeses, hablamos un buen rato y tras ducharnos salimos los 4 a hacer un paseo nocturno por la carretera que bordea el parque nacional y las reservas, porque muchos guías nos han dicho que es ahí donde se encuentran los animales por la noche.
Y la verdad que tenemos suerte, vemos lemures, ranas verdes con las patas rojas y un par de camaleones que encuentran los guías acompañantes de la gente que esta haciendo el trekking nocturno.
Hace mucha humedad y regresamos a la habitación muertos de frío, suerte que dentro de la cama se esta a la gloria.
Tomando un café y desayunando, antes de visitar la reserva
Entrada a la reserva


Y aunque no podemos sacar buenas fotos, aquí tenemos a los Indris
Indri
  

El impresionante camaleón Parsons


A ver si me veis! Estoy camaleoneado!!

Orquídeas
Niños jugando en la calle
Parque de las orquideas
Andando carretera arriba y carretera abajo

Camaleón nocturno
Ranita nocturna
Una buena sopa para cenar

09 y 10/09/2016 De HellVille a Andasibe


Suena el despertador a las 5, nos duchamos para salir fresquitos y vamos a desayunar. Nos despedimos del señor de los bocadillos de nocilla y del señor del café, que nos desean muy buen viaje.

Nuestro primer objetivo de hoy es coger el ferrys para volver a la “gran tierra”. Aunque en Nosy Be las sirenas nos ofrecen los billetes a Antananarivo desde el puerto de Ankify, creemos que los precios son más elevados, por lo que decidimos hacer todos los pasos solitos.

Una vez en el puerto, nos ofrecen coger una lancha motora, que sólo tarda 35 minutos en llegar a tierra, mientras que el ferry's tarda prácticamente dos horas. Evidentemente, el precio es el doble. Puesto que la venida la hicimos en lancha motora y que sabemos que los autobuses a Antananarivo no salen hasta el mediodía, decidimos ir en el ferry's. Subimos a éste y se empieza a llenar de gente y más gente y más gente y cuando parece que no cabe nadie más, sigue entrando gente... Como somos turistas, a nosotros nos buscan un huequecito para que podamos apoyar el culo. Lo curioso es que justo delante nuestro, queda un espacio vacío y aunque algunos malgaches intentan quedarse en ese espacio, los responsables del ferry no los dejan. Y aunque al principio no lo entendemos, de golpe vemos aparecer un grupo de gente en procesión, siguiendo a un hombre que lleva una gran cruz de madera del tamaño de una persona. Y entonces vemos para que es el hueco.... Detrás del señor de la cruz, llevan un ataud con un muerto dentro, tapado con una sábana. Se abren paso entre la gente y nos colocan el muerto pràcticamente a nuestros pies, sentándose después todos alrededor de la caja. Viendo como se nos presenta el trayecto, la BM quiere salir y coger una lancha, pero estamos tan apretados que resulta Misión Imposible, teniendo que resignarnos a viajar con tan grata compañía.... Pese a todo, una vez el ferry sale del puerto, el viaje es bastante tranquilo y llegamos sin más a Ankify. Ankify está a 17 km de Ambanja, desde donde sale el bus a Antananarivo. El precio del bus es totalmente desproporcionado para los kilómetros que son, pero tras preguntar en varios taxi-brousses, hay uno que nos ofrece el precio de la guía, por lo que nos subimos sin más. No hay nadie a bordo, así que nos toca esperarnos hasta que terminan de cargarlo y de llenarse. Al cabo de media hora, salimos hacia Ambanja, pero la estación donde nos dejan, no es la estación des de la que sale el otro bus, por lo que yo me quedo con las mochilas mientras la BM va a ver si la encuentra. Tarda muchísimos en volver y es que la otra estación está a unos 2 o 3 kilómetros y hace un sol de justicia.... Ya tiene reserva en el bus y con la mejor compañía, por lo que nos relajamos un poco y con las mochilas a cuestas cambiamos de estación, pagamos los billetes de bus y como quedan todavía un par de horas para que salga el bus, nos vamos a tomar una merecida Coca-cola fresquita y comer alguna cosa. El bus sale a las 12'30, con tan solo media hora de retraso y sorpresa-sorpresa, los asientos que nos han dado son amplios y cómodos, con espacio para nuestras piernas.... A diferencia de la música Malgache a todo trapo que nos tenían acostumbrados, este bus parece que salga de un musical religioso. No paramos de escuchar canciones de misas con Aleluyas y Amenes como estribillos. Por si fuera poco, en la fila de atrás está la familia más debota de Madagascar, cantan todas las canciones a dos y tres voces y no se dejan ni una.... Para este último trayecto largo, queríamos disfrutar de todas las canciones que hemos ido escuchando, pero parece ser que este capricho nos va a ser negado....

Pero no, cuando llega la noche, al conductor le da por cambiar de tercio y entonces sí que nos pone las animadas canciones malgaches a todo trapo!

De todas maneras, dormimos bastante bien y tras las dos o 3 paradas reglamentarias para cambiar de conductor, vamos bastantes directos a Tana. Sobre las 6 de la mañana, llegamos a la estación del Norte, pero el siguiente bus lo hemos de coger en la del este. La BM va a buscar información y enseguida encontramos un bus local para desplazarnos a la siguiente estación. Llegamos a una pequeña estación y sin problemas nos hacemos con dos billetes a Moramanga, donde tenemos que coger el siguiente y último bus a Andasibe. Desayunamos mientras esperamos que el taxi-b se llene y cuando lo hace, partimos, para llegar a Moramanga 2 horas después, pasando por preciosos paisajes verdes, ríos, arrozales y pueblos de montaña. En Moramanga tenemos la suerte que el siguiente bus sale exactamente de la misma taquilla en la que estamos y aunque hay que hacerse espacio entre los locales para comprar los billetes, conseguimos coger el bus siguiente, que es una especie de bus-tanque que creemos que servía para desplazar los prisioneros a la cárcel, ya que no entendemos las rejas que nos separan del conductor.

Y por fin, tras día y medio de viaje, sobre el mediodía, llegamos a Andasibe.

Y aunque la llegada no es como esperábamos (el pueblo es realmente pequeño, sólo hay una calle y no hemos visto hoteles.....) estamos contentos de haber superado este traslado. Me quedo con las mochilas y la BM sale a investigar. Vuelve a los 5 minutos habiendo encontrado una preciosa habitación dentro de nuestro presupuesto y sin ganas de seguir buscando, nos instalamos, dejamos las mochilas y salimos a hechar una ojeada a la zona. Andasibe tiene un parque nacional y varias reservas alrededor de éste, ofreciendo todas lo mismo: ver los indris y alguna que otra especie, según la suerte que tengas ese día. Así que vamos a las 3 más cercanas, nos encontramos con una japonesa con la que habíamos coincidido en Nosy Be y reservamos un guía para mañana en una de las reservas, que son mucho más económicas que el parque nacional.. Por la carretera que va al pueblo, escuchamos los gritos de los indris y vemos algún lemur, así que esto pinta emocionante. Encontramos un lugar donde alimentarnos y aunque la comida sólo sirve para llenarnos el estómago, hace su función. Contentos, vamos a ducharnos (sí, por fin!!!) y ya limpitos salimos a tomar nuestra Coca-cola, con los ojos que se me cierran. Helados de frío, volvemos a nuestro alojamiento y sobre las 19'30 estamos en el feliz mundo de los sueños. Y aunque el lugar no pinta tan tranquilo como nos habían dicho (el bar del pueblo está en la esquina y los malgaches están en plena fiesta de sábado noche) conseguimos cerrar los ojos y quedarnos dormidos.
 
Adiós a nuestra casa de los últimos días

Y vuelta a la tortura del taxi brousse.

Volvemos a estar en la Tierra Grande

Meadero
 

06, 07 y 08/09/2016 Nosy Be

Tres días de celestial rutina: copioso desayuno, pasear un poco por las calles de Hellville, taxi brousse hasta la playa de Andilana, paraíso, paraíso, paraíso durante horas..... Vuelta a Hellville, deliciosa cena...... Nada que añadir.

Pero todo lo bueno se acaba y aunque nos debatimos entre pasar los días que nos quedan en Nosy Be y ver el indri (el lemur más grande que existe) y el camaleón Parson's (también el más grande en Madagascar) para lo cual tenemos que desplazarnos a Andasibe y aunque el debate es difícil, ya que estos dos animales también los podemos ver en Lemurlandia, una especie de Zoo que hay en Nosy Be para que los turistas que no tienen pensado viajar a la “gran tierra” puedan ver lo que se pierden, finalmente decidimos cargarnos las mochilas y terminar con nuestro plan inicial, ya que no es lo mismo ver los animales en su habitat natural que en un zoo.
Como delante del mercado de Nosy Be hay algunos cambistas que nos cambian el euro al mismo precio que lo compramos, recuperamos algunos euros ya que estamos viajando por debajo del presupuesto inicial. Y es que Nosy Be, como el resto de Madagascar, nos está saliendo muy económico.
Antes de acostarnos el día 9 preparamos las mochilas, que parece que se han encogido.... Avisamos a la señora de nuestro alojamiento que mañana nos vamos (no parece muy apenada, cosa que no entendemos, ya que durante 9 noches hemos sido sus únicos clientes, exceptuando una noche que hubo dos personas más....) y nos acostamos tempranito porque el traslado a Andasibe requiere de más de día y medio de traslado y de varios cambios de transporte.
 
 
Salpicadero de un taxi brousse cualquiera.
 
Más fotos de nuestro paraíso
 
Estrella de mar
 
Avenida principal en el centro de Hellville
  
Cabras, haciendo la siesta en el cementerio
 
 
 
La señora que nos prepara los bocadillos de atún con ensalada a diario
 
Fachada del mercado de HellVille
 
Y aunque no lo parezca, esta zona también es Nosy Be
 
 
Aunque es más conocida por estas imágenes.
 
 
 
Recuerdo de Madagascar
 

05/09/2016 Nosy Be - Snorkel en Nosy Tanikely

A las 06h suena el despertador, la B.M ya hace rato que esta despierta, nos preparamos para la excursión de hoy y salimos a la calle, primero a desayunar y segundo para comprarnos la comida del día.

Con todo listo caminamos hasta el embarcadero, hemos quedado a las 08h con Toto, el hombre que nos ha de llevar a Nosy Tanikely, pero estamos tan ansiosos que nos presentamos a las 07:30h. Justo antes de llegar al embarcadero nos viene corriendo un hombre que dice que viene de parte de Toto, que éste no puede venir porque estácon otros clientes pero que no nos preocupemos, que él lo tiene todo listo y nos lleva por el mismo precio. Se le cae la mandíbula cuando se entera del precio que teníamos pactado (80.000Ar), pero de todas maneras dice que nos lleva. Nos pide que le esperemos allí mismo mientras acaba de preparar la embarcación, que no nos preocupemos que está todo listo. Vuelve al cabo de 10 minutos para decirnos que no puede llevarnos él porque tiene otros clientes, pero que esperemos al barquero que este es el definitivo y a más a más habla inglés. Al final resulta que sí era el definitivo pero que no habla inglés, sólo francés. Le repetimos las condiciones pactadas a las cuales esta de acuerdo y a las 08h empezamos el viaje.

El traslado en barco dura una media hora, y una vez en la isla lo primero que hacemos es pagar las taxas de visita (10.000Ar por persona), luego cogemos las máscaras de snorkel, dejamos la mochila con el guardia y nos metemos en el agua... y precisamente caliente no está, todo lo contrario pero es poner la cabeza bajo el agua y entrar en un submundo totalmente nuevo e increíblemente bello. Hay todo tipo de peces de colores, parece que estemos en un acuario gigantesco y vamos en busca de tortugas y suerte que la B.M va conmigo porque las encuentra a la primera, no sabría como describir todo lo que vemos y sentimos (quitando el frío que hace, claro está). En total hacemos 3 inmersiones y nos estamos más de una hora y media con cada una. Vemos coral de todo tipo y variedad de colores, peces pequeños y enormes, estrellas de mar y hasta un pulpo y una langosta, pero lo más apasionante son las tortugas que la B.M me encuentra a cada cual más grande. Vemos aproximadamente entre 10 y 11 tortugas con cada una de ellas nadamos hasta que nos cansamos.

Cuando el frío se apodera de nuestros cuerpos serranos, salimos a calentarnos al sol, pero como nos lleva tiempo aprovechamos para subir al faro de la isla y ver las vistas desde allí.

A las 15h abandonamos la isla, somos los penúltimos en dejarla y eso que hemos llegado de los primeros y sobre las 15:30h llegamos a Nosy Be, donde sin pensarlo dos veces caminamos derechitos hasta nuestra habitación, donde nos pegamos una buena ducha y entramos en calor.

Una vez hemos recuperado nuestro color de piel habitual, salimos a merendar-cenar, tenemos un hambre de lobos hoy, y tras la cena nos tomamos nuestra coca cola en un local donde tienen wifi y aprovechamos para hablar con la familia. Intentamos actualizar el blog, pero sin conseguirlo por culpa de la conexión, es muy pero que muy mala y nada estable, al final hemos de dejarlo estar por puro aburrimiento.

Y ya bien de noche nos recogemos en nuestra habitación a descansar y entrar en el reino de los sueños con una sonrisa de oreja a oreja gracias al día de hoy.
 
Nuestro barquito alquilado para la excursión de hoy
 
 
Rumbo de Nosy Tanikely
 
Llegando a la isla
 
Bienvenidos al parque nacional marino!!
 
Preparándonos para la búsqueda de las tortugas
 
Compañeros de isla
 
Faro de Nosy Tanikely
 
Aquí estamos los dos...
 
Voy a seguir disfrutando de este paraíso subterraneo.
 
 
 
De vuelta a Hell Ville
 
Vehículos de Madagascar
 
Concentrado, intentando actualizar el blog, tarea casi imposible....