lunes, 29 de septiembre de 2014

25/09/2014 de Tinerhir a Marrakesh

A las 04h suena el despertador, vaya noche hemos pasado...Como nos suele ocurrir en los días de madrugón, las noches se nos hacen muy largas y nos despertamos infinidades de veces, para al final despertarnos mas cansados que cuando nos fuimos a dormir. A las 04:15h el Sr. de la agencia nos viene a buscar y nosotros que ya estamos listos y mas que listos nos vamos tras el. A su hora el bus sale tenemos suerte y estamos en segunda fila aunque la separación de los asientos es tan ancha como la de Ryannair. La BM no llega al 1 km que ya se ha quedado K.O. Y a mi me cuesta unos cuantos km mas, despertándonos en lo alto del Atlas, ver sus impresionantes vistas y la serpenteante carretera. Por las filas de atrás se van pasando las bolsas de plástico que afortunadamente no necesitamos. Por fin llegamos a la capital y adiós a la tranquilidad de los pueblos, la estación de buses es un hervidero del cual salimos ilesos y como es la hora de comer, antes de empezar a mover ficha, decidimos llenar nuestros buches, así luego lo veremos todo muy claro... Seguimos hasta la plaza jmma el Fna, el centro neuralgico de la capital, encontramos la oficina de correos y mientras yo me quedo con las mochilas la BM va a buscar alojamiento, hoy la peregrinación dura mas de lo previsto pero al final ha encontrado un hotel a las puertas de la misma plaza . Tras instalarnos, quitarnos las capas de sudor y cambiarnos las vestiduras salimos a explorar la plaza, que es tal y como esperaba: centenares y centenares de gente por todas partes, encantadores de serpientes, magos, acrobatas, lugares para apostar y jugar juegos de azar, tatuadoras de henna, decenas de puestos de zumo de frutas, tiendas de souvenirs por todas partes, gente tocando tambores, gente tocando otros tambores, vendedores de todo y nada, ruido, ruido, ruido..... Es algo increíble y espectacular, por algo se ha ganado formar parte del Patrimonio de la Unesco. Decidimos perdernos por las callejuelas del zoco, nuestro pasatiempo preferido, des de donde reaparecemos casi siempre en la plaza. Sobre las 18 horas empieza un nuevo espectáculo: la llegada de los restaurantes ambulantes, que en menos de media hora invaden parte de la plaza. Se instalan mas de 100 en un momento y empiezan los gritos, cantos y todo tipo de artimañas para atraer la atención de los turistas.... Paseamos por aquí y por allá, miramos y remiramos, decidimos probar un bocadillo de patata hervida con huevo duro, quesito, cebolla y salsa picante, con comino y sal y un gran chorro de aceite de oliva y que resulta estar delicioso y que se gana nuestro segundo reconocimiento en este viaje de la categoría de “Ma d'angel” (para los interesados, es el puesto numero 66). Vemos un montón de gente local alrededor de otro puesto donde hacen batidos de fruta, nos metemos entre ellos y pedimos 2. Nunca habíamos probado un batido tan rico: lleva fresas, dátiles, banana, aguacate y 3 o 4 frutas mas, una delicia para los sentidos. Cuando nos cansamos de andar, nos sentamos en los escalones de la oficina de correos, a ver pasar a la gente y cuando nuestros ojos se cierran por el largo día que llevamos hoy encima, nos levantamos y en menos de 2 minutos, nos encontramos en nuestro céntrico y barato Hotel des Amis, donde tras la ducha nos rendimos y nos damos el reposo tan necesitado.

Deliciosa ensalada de frutas.

Paseando por el centro

Apetece?

Puestos del mercado.

Nuestro centrico hotel Des Amis

Puesto numero 66: no hay que perderselo!



23 y 24/09/2014 Tinerhir: Garganta y valle de Todra.

Aunque la idea inicial era pasar un día en Tinerhir para visitar la garganta de Todra, al final decidimos quedarnos otro para disfrutar de sus palmerales y sus kasbahs, por que hay infinitas y con vistas increíbles.
El día 22 cogemos el taxi a las gargantas, que están a 15 km y nos deja al pie de las mismas. Cuando llegamos, a las 8 de la mañana, no hay nadie y todo esta muy tranquilo. Pasamos por la garganta y seguimos por la carretera unos 3 km, para ver las vistas. Volvemos a la garganta, que se ha transformado en las ramblas de Barcelona. Hay autobuses por todas partes, furgonetas turísticas, paradas de souvenirs, gente y mas gente pasando por la garganta y tomando fotos..... Decidimos empezar nuestro trecking, hasta la cima de la garganta y regresando hasta Rissani a pie, de esta manera podremos sacar fotos de las kasbahs que hemos visto mientras veníamos con el taxi. El trecking es espectacular y las vistas..... no hay palabras! Cuando llegamos a la cima de la montaña, perdemos el camino, volviéndolo a encontrar mas tarde. Sacamos fotos por un lado y por otro lado, hasta que cansados empezamos el descenso. Nos perdemos por las montañas, encontramos una tienda nómada con una mujer y sus hijos, que nos indican el durisimo camino de bajada. Y bajamos, bajamos y bajamos hasta que mis rodillas empiezan a romperse por todas partes..... Cuando llegamos abajo, estamos destrozados y todavía nos quedan 15 km para llegar a Tinerhir. Volvemos como podemos, parando a descansar en las zonas donde las vistas son mejores y sacando fotos de kasbahs de película entre palmerales. Las ultimas kasbahs, ya ni las veo, tengo los ojos nublados del dolor que emana de mis rodillas y es entonces cuando decidimos quedarnos otro día y volver para acabar de disfrutar todo lo que ofrecen los alrededores de este magnifico lugar. Vamos al restaurante de ayer, y nos preparan otra tajine deliciosa (aunque a mi no me gusta tanto, por que lleva una especia,que descubrí en Vietnam y no la soporto) y hoy a mas a mas nos regala un te de menta a cada uno después de comer, vamos que incluso para nosotros es un chollazo y con la boca bien grande, decidimos atorgar a este establecimiento, café y restaurante Central de Tinerhir, la categoría honorosa de “Ma d'angel”. Después de la copiosa cena, nos tomamos nuestro yogur liquido en la plaza del pueblo y tras el ultimo sorbo directos a la cama con parada en la ducha y hasta el próximo sol.

El 23 seguimos al mismo ritmo que el día anterior, levantándonos temprano y poniéndonos en acción con los primeros rayos de sol. Lo primero que hacemos es ir a comprar los billetes de bus para mañana, queremos coger el bus de las 07:30h, pero para nuestra fortuna nos dicen que no saben si mañana habrá, dándonos de alternativa, 05h o las 09:30h, nosotros nos quedamos con los billetes de las 07:30h pero con la condición que si no viene cogeremos el de las 09:30h, y empezamos nuestro trecking del día por medio de los palmerales. Como viene siendo costumbre en nosotros nos terminamos perdiendo, para volvernos a encontrar y volvernos a perder y así todo el día. Visitamos los kasbahs que vimos ayer, que por cierto son mas espectaculares desde lejos que desde dentro. Hoy nos libramos de ser apedreados por los niños aunque no de sus ruegos y plegarias. A media tarde volvemos al pueblo, aun no me he recuperado del día de ayer... Volvemos a la agencia que nos ha vendido los billetes, donde nos comunican que el bus de las 07:30h mañana no saldrá y con todo nuestro pesar decidimos cambiarlo por el de las 05h, mañana sera un día largo, largo. El resto del día nos lo tomamos muy tranquilos: nos aprovisionamos un poco para el día de mañana, paseamos, cenamos nuestra tajine en nuestro puesto con te incluido, volvemos a la plaza a tomarnos nuestro yogurt y sobre las 21h regresamos a nuestro aposento para dejar las mochilas casi listas e irnos a dormir.

Uno de mis pasatiempos favoritos: cortarme el pelo en diferentes paises.

Foto de la garganta.

Garganta de Dades.

Dades gorge.

Trecking por la garganta de Dades.

Caminando y subiendo por la garganta.

Parece que la subida no acaba nunca.

El camino de vuelta: vistas al valle y las kasbahs.

Llegando a Tinerhir.

Mas kasbahs que vamos encontrando por el camino.

Parecen decorados de peliculas.

TaJine de pollo con verduras.

Que hambre tendo!!

Despues del descanso, visitamos de nuevo las kasbahs de los alrededores.

Muchas de ellas estan abandonadas y es toda una experiencia visitarlas.

Incluso descubrir casas abandonadas, escaleras ocultas, terrazas con vistas....

Entre los palmerales, entre kasbah y kasbah.

Que agradable paseo....

Y que vistas!

Espectacular!!

TaJine de kefta y huevos.

22/09/2014 de Rissani a TinerhirPa

Nos levantamos, desayunamos y saltando entre charcos y pasando entre ellos, llegamos a la estación de buses una hora antes de la hora de salida. Para hacer mas agradable la espera, nos tomamos el típico te con menta marroquí, al que estamos cogiendo gran afición. A las 10, el bus sigue sin aparecer. Lo que si que aparecen son varios turistas acompañados con sus guías, cada uno de ellos con algún problema. Hay un par de chicas que van solas, una de ellas no para de llorar desconsolada. Les preguntamos si necesitan ayuda, pero dicen que están bien. Vemos al señor que ayer nos confirmo el bus y le preguntamos, pero nos dice que a causa de la lluvia, hay un problema en la carretera y el bus no puede llegar a Rissani, que tenemos que coger un bus a Erfoud y des de allí hay un bus a las 15 horas a Rissani. Subimos al bus, que en esos momentos sale y vamos a Erfoud (son 17 km). Una vez allí, recogemos las mochilas y preguntamos por el bus a Tinerhir. En ese momento aparece el conductor del mismo, diciendo que el bus saldrá a las 15 horas si no llueve y que en caso de lluvia, no saldrá. Miramos el cielo, que esta totalmente encapotado. Pedimos consejo al conductor de nuestro bus y nos dice que mejor que sigamos en el bus hasta Er Rachidia (77 km mas al norte) y que desde allí hay “muchos, muchos, muchos” autobuses a Tinerhir. Tenemos dos opciones: o hacer los 77 km extras o arriesgarnos a esperar hasta las 15 rezando para que haya bus. Como nuestra fe no esta muy puesta, apostamos por la jugada segura y seguimos en el bus hasta Er Rachida, donde solo llegar, nos da el tiempo justo de cambiar las mochilas de bus y esta vez si, dirigirnos a Tinerhir, según la guía un pueblo lleno de arena y sin nada de interés, cerca de las gargantas de Todra.
El bus nos apea en medio de una calle polvorienta. Me quedo con las mochilas mientras la BM busca alojamiento y vuelve en 10 minutos para informarme de que ha encontrado un hotel de nuestro presupuesto, con wifi y agua caliente. Sigue buscando, para volver a los 15 minutos con otro hotel en el centro, mas económico, aunque sin wifi, al que renunciamos sin problemas. El hotel esta en el centro del pueblo, al lado de los restaurantes y la “plaza mayor”, que parece muy animada. Salimos rápidamente a “investigar” los alrededores y todo lo que vemos nos encanta: palmerales en medio de las montañas, kasbahs por todos lados, montañas y caminos para seguir, callejuelas y mas callejuelas de mercado, restaurantes con precios locales..... Andamos, paseamos, subimos a los miradores y disfrutamos como camellos... Cuando nos entra el hambre, vamos hasta el centro y nos comemos una tajine deliciosa a un precio ridículo, con sus olivitas y su pan para “sucar”. Contentos como nadie, vamos a informarnos de donde coger el taxi compartido mañana para ir a las gargantas, información que conseguimos en un santiamén ya que todo el mundo es muy simpático y colaborador. Una de mis rarezas es ir a la barbería de todos los países que visito, y como ya empiezo a tener el pelo largo ( dígase me tengo que peinar) entro en una donde me dejan como un figurin. Sobre las 21 horas, parece que el pueblo se apaga. La gente va desapareciendo y todo se vuelve tranquilo, Así que subimos a nuestra habitación a descansar, que mañana nos espera trecking de 30 km!!

Vistas al pueblo de Tinerhir

Como se puede ver, esta rodeado de palmerales.

Parada de taxis compartidos, donde nos informamos de como ir manyana a las gargantas.

Proimer plato de la cena: bocadillo con patatas fritas.

Segundo plato: tajine de cordero con verduras.

21/09/2014 de Merzouga a Rissani.

Después de estos días en el desierto, llega el momento de la vuelta a Rissani. Debido a las lluvias de ayer, parece ser que todos hemos llegado a la misma conclusión, ya que las dunas y todas las calles están inundadas y tampoco hay nada que hacer ahora en Merzouga. Saltamos el barro como podemos y llegamos a la parada de taxis compartidos. Nos toca el mismo conductor que nos trajo. Estamos los dos solos y hemos de esperar a ser 6 pasajeros. Mientras esperamos, el taxista recibe una llamada tras la cual nos pide que saquemos las mochilas del maletero por que tiene una urgencia familiar. Cambiamos las mochilas, seguimos esperando, y al cabo de media hora estamos las 6 personas necesarias para que el taxista emprenda el camino. En nada y menos (la carretera hasta Merzouga es una recta interminable, con desierto a ambos lados, tipo Las Vegas) llegamos a Merzouga y vamos a la guest house de nuestro amigo Moustafa, justo delante del mercado y de la parada de taxi compartido. Como hoy es día de mercado en Rissani, queremos pasar la mañana visitándolo y después ir a ver los kasbhas que nos quedaron pendientes cuando estuvimos aquí hace unos días. Tras un par de horas, tenemos suficiente de mercado, por que las calles están encharcadas y cuesta pasearse por ellas. Ademas esta lleno de turistas que vienen con sus guías a comprar disfraces Bereberes (túnicas y turbantes) para sus excursiones por el desierto. Nos dirigimos hacia la parte del circuito turístico que tenemos pendiente. En primer lugar, llegamos al Mauselou de Zawiya Moulay Ali ash Sharif, que permite la entrada a no musulmanes. Nos gusta mucho por sus arcadas y sus mosaicos. Después nos dirigimos al Ksar Aber, donde vivian las ovejas negras de la realeza. Esta prácticamente todo en ruinas y por ello podemos pasear tranquilamente por sus calles, sin niños ni adultos que nos pidan dinero. Cuando nos cansamos de sacar fotos, nos dirigimos al ultimo destino, el Ksar Oulad Abdelhalim . Al llegar nos quedamos con la boca abierta, ya que es increíblemente bonito y parece un escenario de cine, nos da la sensación de haber llegado al portal de Belen!! Todo esta limpio, las calles, la muralla, las casas.... Nos colamos en un par de casas y vemos restos del antiguo palacio del hermano mayor del sultan Moulay Hassan. No vemos a nadie por las calles, todo esta en silencio, nos da la sensación de haber entrado en algún lugar prohibido. Finalmente aparece un hombre, muy amable, que nos dice que en la actualidad están reconstruyendo el kasbah y por eso esta todo tan arreglado. Le damos las gracias, acabamos de pasear por las calles y emprendemos el regreso a Rissani. Llegamos en un plis plas y como es la hora de la comida, vamos a encargar la especialidad local: la pizza Berebere, que viene a ser como una empanada rellena de carne y cocinada con 44 especies diferentes. Encargamos el tamaño mediano (para 4-6 personas) y nos vamos a la terraza de nuestro hotel, con vistas al mercado, para comernosla. Por desgracia, solo sentarnos aparece la lluvia, que nos obliga a retirarnos a nuestra habitación, que por suerte tiene grandes ventanales y zona de “relax”. Nos comemos la pizza tranquilamente y después vamos a la sala de estar del hotel, donde nos tumbamos a ver caer la lluvia, que ya no para en toda la tarde, embarrizando todavía mas las calles. Sobre las 20 horas, la lluvia nos da una tregua, y salimos a comprar el desayuno de mañana e ir a la estación de buses para re-comprobar el bus de mañana (solo hay bus a Tinerhir los lunes, miércoles y viernes), y des de allí nos confirman que mañana a las 10 hay bus. Como todavía estamos llenos de pizza, cenamos unos yogures, preparamos las mochilas. Nos retiramos a la cama tempranito, ya que tampoco hay mucho que hacer.....

Puesto de venta de especies en el mercado de Rissani.

La gente de los alrededores acude al mercado en transporte local.

Mausoleo de Zawiya Moulay Ali ash Sharif (Rissani)

Otra vista del Mausoleo.

Ksar Oulad Abdelhalim

Puerta de entrada a Ksar.

Ksar Aber, en la actualidad.

Blanco y negro.

En nuestra habitacion, con la Madfouna (pizza bereberer con 44 especies)

Madfouna.

sábado, 20 de septiembre de 2014

19 y 20/09/2014 Merzouga

Para intentar aprovechar los días antes de que aparezca el viento, utilizamos una estrategia: poner el despertador antes de que salga el sol, para estar en las dunas a las 7 y gozar de ellas. El primer día, el plan sale perfecto y subimos la “gran duna” pudiendo disfrutarla desde todos sus ángulos, incluso vemos a un grupo de turistas hacer lo mismo que nosotros pero “guiados”. Desde la gran duna también vemos las caravanas de camellos de la gente que vuelve de pasar la noche en el desierto. Sobre las 11 volvemos a estar en el hotel, ya que el viento aparece y se nos mete por todos los orificios, obligándonos a caminar con los ojos achinados.. Dormimos una pedazo de siesta, comemos y pasamos la tarde oyendo soplar el viento y observando como las dunas se desplazan. Sobre las 18 horas, volvemos a “la calle” y nos encontramos con Said, que hoy tiene fiesta y quiere invitarnos a comer cous-cous a casa de un amigo (plato que todavía no hemos provado por que solo se sirve los viernes y nunca nos coincide en algún lugar donde lo cocinen). Por desgracia, su amigo, que hace su aparición en unos minutos, se ha terminado ya el cous-cous, por lo que nos despedimos y nos vamos a tomar nuestra sopa predilecta, acompañada de un par de huevos duros.
El segundo día, todavía lo aprovechamos mas por que el cielo esta nublado y nuestra incursion a las dunas dura hasta la hora de comer. Por nuestra expedición por el Sahara, nos encontramos con las caravanas de camellos y lo mas curioso, un grupo de turistas franceses, equipados como si fuesen a escalar el Everest (botas de montaña, palos de trecking, mochilas, polainas.... etc) cuyo destino es simplemente la Gran Duna donde estuvimos ayer y a la que subimos descalzos... También encontramos camellos descansando, a los que hacemos fotos. Cuando el hambre aprieta, regresamos a “casa”, no antes sin pasar por el pueblo a aprovisionarnos. Llegamos en el momento en que empieza la lluvia, comemos y sin hacer la siesta, aprovechamos para actualizar el blog y hablar con el otro único huésped de nuestra pensión.
Por la tarde, después de una pequenya siesta salimos a pasear un poco por el desierto (otra vez) y después investigamos un poco mas el pueblo y cual es nuestra sorpresa al ver que hay mas de una calle y no la única que nosotros conocíamos.....
Cuando nos cansamos de pasear, nos tomamos un te a la menta en la terraza, dejando que sea el mundo el que se mueva a nuestro alrededor. Sorprendentemente, el tiempo cambia y notamos el frío en nuestra piel. Adelantamos la cena (nuestra sopa harira) y regresamos al hotel justo antes de que empiece la tormenta, no solo de lluvia sino también eléctrica. El dueno nos informa de que para los próximos días se preveen lluvias.
Nos duchamos, preparamos las bolsas y vamos al sala de estar a finalizar el blog y navegar un poco por internet.
A las 21 horas estamos en nuestros aposentos, listos para acostarnos. 

Dunas del desierto

Mas dunas....

La Gran Duna

Estoy aqui!!!

Y la BM tambien!!!!

Dejando  nuestras huellas en el Sahara.

Calzado basico para caminar por el desierto.

Simpaticos modelos.

Tienda bereber con sus "vehiculos" a la puerta.

Y como no podian faltar: clasica imagen de palmeras en el desierto.

No todo es arena, tambien vemos algo de vegetacion.

Caravana de turistas en el Sahara.

Reloj solar?

Mas y mas dunas.....

Asi tenemos los pies la BM y yo, aun desalzos parece que llevemos calcetines blancos!

Y no me canso de andar.....

... y andar.....

.... y disfrutar de las vistas.....

Mientras, la BM prefiere realizar nuevas amistades.....

Y se acaba haciendo gran amiga de este camello.

Al fondo, el "pueblo" de Merzouga.