Mochileando por el Mundo: Del 01-07-2012 al 06-07-2012 Ganzi

Ganzi es una ciudad que nos ha sorprendido muy gratamente, en la que solo pensábamos pasar 3 o 4 días y en la que nos hemos quedado casi el doble de lo planificado, ya que nos ha gustado mucho.

Para empezar y lo mas importante, el tema de la comida conseguimos resolverlo bastante bien. Para la comida y puesto que cada día estábamos visitando los alrededores de la ciudad, optamos por salir siempre provistos de bocadillos de pinchos chinos, acompañado de medio litro de leche con millones de vitaminas de toda clase... y para las cenas, la BM encontró un restaurante donde servian momos (especie de bollos blancos rellenos de carne en nuestro caso hechos al vapor), que nos encantan.... y donde la camarera-cocinera llevaba una minifalda tan corta que solo le cubría la zona de los riñones, dejando el resto al aire cosa que me alegraba aun mas la cena....

La ciudad de Ganzi nosotros la diferenciaríamos en 2 partes: la china y la tibetana. Y por descontado, la parte tibetana y su gente nos encanta, aunque naturalmente para entrar al monasterio hay que pagar tickets, pero como tienen tantas puertas como la catedral de Burgos y una sola taquilla se hace muy difícil pagar la entrada... El templo y el área donde viven los monjes nos gusta mucho y nos estamos muchas muchas horas, incluso un día un monje-profesor nos invita a que demos una clase de ingles a sus estudiantes, pero por un mal entendido de la hora y del lugar no podemos hacerlo y luego no volvemos a verlo o reconocerlo.

También aprovechamos para ir a visitar un par de templos que se encuentran a 30 y 15km respectivamente a los que obviamente vamos haciendo autoestop, y sin ninguna dificultad nos recogen. De templos tibetanos, a estas alturas hemos visto muchos y ya no nos impresionan como al principio ,pero de lo que yo si sigo fascinado es de los paisajes y vistas, realmente son increíbles me tienen enamorados. A mas a mas, los campos están llenos de flores de colores y todo tipo de bichos y sentarte en el prado o en la cima de alguna montaña a ver las vistas y disfrutar del momento para mi resulta algo orgasmico, hasta tal punto que el ultimo día la BM y yo nos estamos todo el día en medio del campo en la cima de una montaña entre todas las flores disfrutando de las vistas todo el día.

Como no queremos que la policía nos eche de la ciudad, nos vamos a registrar, y la cosa no resulta fácil, mas que nada por el tema del idioma. Suerte que coincidimos con un matrimonio occidental que viven en China y nos ayudan, porque sino creo que nos hubiésemos pasado todo el día.

La única pega es que los turistas extranjeros no tenemos acceso a internet, se ve que hace un par de semanas un chico se inmolo en protesta contra el gobierno y por esta razón a los turistas nos han vetado el acceso.

La GH donde estamos a partir de la segunda noche le bajamos el precio, estamos bien a pesar de realizar el ritual de la palangana cada día y lo mas divertido, al ser nuestra habitación la ultima del pasillo, mucha gente la confunde con el aseo (que esta en la otra punta del pasillo) y a veces sin querer entran decididos en ella y cuando nos ven se quedan literalmente se quedan con la boca abierta, pero no hacen amago de salir, no, si no que entonces quieren entrar y mirarnos “mas comodamente”. A mas a mas, mi barba de pirata canoso les tiene fascinado, y algunos hombres y mujeres no solo quieren tocarme la barba sino también los pelos de las piernas ( la BM y yo somos los únicos que vamos en pantalones cortos y esto provoca una gran expectación no solo en la GH sino también por la calle, pero a estas alturas ya estamos acostumbrados aunque a veces tengo que reconocer que se hace pesado.

Y por descontado, aquí a pesar que casi no hay perros tibetanos un día me llevo un buen susto, suerte de la pronta reacción de la BM que ahuyento a los perros, porque yo me quede paralizado

Ya con mas ganas de cambiar de aires nos preparamos para el traslado, preparando las mochilas y esperando que mañana alguien nos recoja.....

Los alrededores de Ganzi son espectaculares

Monje rezando mientras observa las vistas, desde el monasterio tibetano principal de la ciudad.

Vistas al barrio tibetano, desde el monasterio.

Simplemente pasar el dia disfrutando de ellas, ya vale la pena.

Para que os hagais una idea de la intimidad de la que uno puede gozar en el pueblo: hay una persona sacando dinero en el cajero, y el resto comentando la jugada (cuanto saca, cuanto le queda...)

En uno de los monasterios que visitamos, encotramos a los lugarenyos sacando fotos y videos y rezando delante de esta jaula, en el interior de la cual hay.... flores!!! Pero todo el mundo nos llama, las senyala y nos dicen "Dalai Lama, Dalai Lama......" Se habra reencarnado el buen hombre en una flor?