miércoles, 31 de marzo de 2010

09-03-2010 Lijiang

A las 07h estamos arriba y a las 07:30h en la calle, aquí continua haciendo mucho frío y vamos tapados hasta las orejas. Nuestro hotel se encuentra justo detrás del mercado local y no turístico, es increíble donde estamos, la cantidad de senyoras de diferentes minorías, aunque la mayoría son reacias a ser fotografiadas algunas se dejan. Con lo que me gustan a mi los mercados, este es uno de los mejores que he visto, no pensaba que después de tanto tiempo y con tanto recorrido me pudiese sorprender, incluso tienen chorizo y jamón serrano. Después de mas de 2 horas dejamos el lugar y empezamos a explorar la ciudad, es toda una joya, es muy turística, pero que muy turística, todos los rincones están muy bien cuidados, y si es patrimonio de la Unesco es por algo. Estamos todo el día paseando arriba y abajo, perdiéndonos y volviéndonos a encontrar. A mas a mas aquí la comida esta buenísima, la especialidad son los pinchos y los tienen de todas clases. En China no creo que mantengamos el peso, con lo que estamos comiendo vamos a salir redondos. Estamos contentísimos que después de 17 meses de viaje, volvamos a ver cosas nuevas y que nos encanten. El único problema, es que en este país todas las “atracciones” son de pago, y vaya precios.. Sobre las 17 horas, nos dirigimos al Black Dragon Pool Park, uno de los rincones mas impresionantes del sudeste asiático. Según la guía, a partir de las 18 horas, la entrada es gratuita, así que nos esperamos. Dejamos pasar 5 minutos después de las 18 y entramos. No sabemos si es porque la mujer que cobra esta de espaldas o por que realmente es gratis a partir de las 18, la cuestión es que no pagamos. El lugar quita el aliento: es la clásica imagen de catalogo de la China, un lago con un puente y una pagoda china de 3 pisos con un fondo de montanyas nevadas. Vamos, que no le falta nada para ser perfecto... Lo fotografiamos desde todos los ángulos y cuando empieza a oscurecer nos quedamos en el mejor rincón contemplándolo mientras se van encendiendo las luces para añadirle si se puede, mas hermosura al rincón. Ya de noche, salimos del recinto y vamos a cenar. Hoy nos tomamos una barbacoa de pinchos. Cansados de todo el día, volvemos a nuestro alojamiento a darnos una merecida ducha de agua hirviendo (estamos congelados!) y a dormir, que manyana toca mas.

No hay comentarios: