miércoles, 5 de septiembre de 2012

21-08-2012 Chengdu

Nos levantamos temprano, porque aunque el avión no sale hasta las 15:55 horas, tenemos millones de cosas que hacer: prepararnos mentalmente, los suegros y nosotros, repasar las mochilas, rehacer las bolsas, la BM y yo cambiarnos al dormitorio de 10 (se acabaron los lujos....), ir a comprar la comida (que nos la comeremos en un rincón del aeropuerto, como el año pasado en Kuala Lumpur), etc, etc..... Para que los suegros no suden, cogemos el bus que nos tiene que llevar a la parada del bus para el aeropuerto, pero el bus no para donde tenia que parar y acabamos andando a pleno sol de mediodía. Suerte que hemos salido con tiempo, si no, ya nos veo alterados de los nervios. El bus al aeropuerto tarda en pasar, mis suegros cantan como chicharras bajo el sol chino.... Al llegar al aeropuerto, a la suegra le entra una “emergencia” y mientras yo la acompaño hasta las puertas del “servicio de emergencias”, la BM y el suegro van a informarse de donde hacer el checking. Al cabo de unos minutos, la BM viene corriendo para decirnos que estamos en la terminal equivocada y que hemos de coger un bus para la otra terminal. Mis suegros, viéndose mas tiempo en China, empiezan a estar verdes y caminan muy ligeritos... tenemos las sospecha de que el suegro tenia mas “pastillitas”. El traslado a la nueva terminal se realiza rápidamente y sin nuevas sorpresas. A la hora de hacer el checking, y como esto es China, tardamos una barbaridad: en la compañía no conocen el numero de vuelo de KLM, no encuentran a los suegros en el sistema.... mis suegros ara están ya verde oscuro..... la tierra prometida no la ven a su alcance! Al final, tras muchos mostradores, azafatas, personal de vuelo y de información, conseguimos que los suegros hagan el checking con el primer avión, que va de Chengdu a Guangzhou, donde tienen que volver a hacer todo el papeleo para el vuelo a Amsterdam, por que la compañía nos dice que, debido a un problema en el sistema, no les pueden facturar las maletas ni hacer el checking directamente. La BM esta muy nerviosa, con lo que ha costado hacer el checking en Chengdu, no se imagina como los suegros van a poder hacer todo de nuevo en Guangzhou, teniendo en cuenta que no hablan ingles. Suerte que ayer les preparo una “chuleta” con algunas frases en ingles-español, aunque dadas las circunstancias, ahora añade algunas nuevas. La ultima comida se realiza en el suelo del aeropuerto: la suegra no quería comer en los sillones porque le daba vergüenza que la viesen, pero no le da vergüenza comer en el suelo y que todo el mundo nos mire.... La despedida por parte de los suegros es agridulce: dulce porque ya se van y agri porque nos dejan aquí y están preocupados por el cambio de vuelo en Guangzhou (el de Amsterdam no les preocupa porque ya es Europa y se sienten “en casa”) Así que con nervios, lagrimas, abrazos y mas abrazos y mas lagrimas y mas nervios, vemos a los suegros desaparecer por el control de inmigración.... La BM esta muy nerviosa, tiene un mal presentimiento con este vuelo, y no quiere salir del aeropuerto hasta estar segura de que los suegros se han ido. Yo, por supuesto, tampoco me quiero ir sin asegurarme que mis suegros SE HAN IDO! Que susto si aparecen de nuevo en la GH mientras estamos durmiendo.... Nos sentamos delante de una de las pantallas del aeropuerto. A la hora de salida del vuelo, este sigue apareciendo como “en tierra”. Pasada mas de una hora, vamos a la ventanilla de China Southern (que es la que opera el vuelo) y nos aseguran que, aunque en las pantallas sale como pendiente de despegar, acaban de salir hace 2 minutos. No muy confiados, regresamos a la GH, ya que de todas maneras no podemos hacer nada mas en el aeropuerto. Dos horas después, estamos de nuevo en Chengdu y como ya es tarde, antes de ir a la GH nos aprovisionamos con la cena, para no volver a salir luego. Y siendo la BM como es, y estando nerviosa como esta, cuando quedan 3 horas para que salga el vuelo de los suegros de Guangzhou a Amsterdam, la BM pide al personal de recepción si podrían llamar a la compañía o al aeropuerto para averiguar si los suegros han hecho el checking y quedarse así tranquila. Los del hotel, muy majos, empiezan la primera de las 50.000 llamadas que les lleva a averiguar que el vuelo a Guangzhou no ha llegado por problemas climatologicos y ha sido desviado a Xiamen!!!. La BM esta mas verde que los suegros cuando se fueron.... Si el vuelo no ha llegado, significa que van a perder todos los enlaces!!!!! Y ademas, solo de imaginarse a los suegros perdidos en China, estamos los dos con el corazón encogido.... Al ver a la BM en ese estado, uno de los chicos del hotel, hace suya la odisea de localizar a los suegros, mientras yo contacto con mi cuñado en España para darle la noticia y pedirle que contacte con KLM para averiguar donde están los suegros en este momento, cuando volaran a Guangzhou y lo mas importante, cuando volaran a Amsterdam. Después de mas de dos horas (en China son las 23 horas ya) el chico de la recepción averigua a donde están los suegros: la compañía les ha llevado junto con el resto de pasajeros a un hotel, a la espera de que el aeropuerto de Guangzhou reemprenda la normalidad. Por su parte, mi cuñado no ha averiguado nada, y no por que no haya puesto empeño en el intento.... el servicio de KLM le mantiene en espera constantemente y cuando consiguen hablar con alguien, es para decirles “que a ellos no les consta ningún problema con ese vuelo”. Sobre las 24 horas, la BM consigue hablar con los suegros, que están muy nerviosos, aunque gracias a Dios, hay 2 españoles mas en el vuelo que les están ayudando con todo. Por fortuna, estos españoles tenían los mismos vuelos que los suegros hasta Barcelona y a mas a mas, hablan algo de ingles. Nos sentimos un poco mas tranquilos, aunque no tenemos ni idea de si a los suegros les van a dar otro billete a Amsterdam ni cuando, pero como no podemos hacer mas por el momento, nos vamos a dormir.

Ultimos momentos en el aeropuerto, empaquetando las coss.

Ultima comida, en un rincon de la terminal.

La BM, sentada en el suelo, sin quitar ojo de la pantalla, para asegurarse de que el vuelo ha salido.

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