Mochileando por el Mundo: 22-08-2012 Chengdu: horas angustiosas

miércoles, 5 de septiembre de 2012

22-08-2012 Chengdu: horas angustiosas

Solo poner el primer pie en el suelo, la BM llama al hotel donde se hospedaron los suegros anoche, solo para saber que ya no están allí y que a la 1 de la mañana se los han llevado a Guangzhou. Nadie le sabe decir si desde allí han cogido ya un vuelo a Amsterdam o siguen en Guangzhou. Ponemos de nuevo en alerta a mis cuñados, que empiezan su nueva lucha por conseguir información por parte del personal de KLM, mientras la buena gente de nuestro hotel y al ver el estado de preocupación que tenemos, vuelven a empezar la búsqueda de los suegros. Un par de horas mas tarde, seguimos sin saber donde están, pero como la BM les apunto en la chuleta el numero de teléfono del hotel, son los suegros que consiguen contactar con nosotros. Por supuesto, KLM sigue sin tener ninguna notificación de incidencias en el vuelo, y por tanto, sin hacer nada al respeto. Mis cuñados han llamado una docena de veces para:
a)ser dejados en espera de que alguien les atienda (esperas superiores a 20 minutos)
b) ser atendidos por alguien que les dice que el vuelo de Chengdu salio y llego sin incidencias a Guangzhou pero sin que los suegros embarcasen
c)siendo colgados al exigir algún tipo de información – explicación al respeto.....
d)técnicas varias para esquivarlos por parte de los teleoperadores (no les oyen, no saben nada, van a preguntar y les cuelgan.... etc)
Los suegros están bien, en un pedazo hotel de lujo y bien atendidos. La única queja es que la llamada que nos están haciendo la tienen que pagar (la compañia no les ha facilitado poder realizar ninguna llamada a las familias para explicar su situación). Suerte que los suegros llevan la visa. Parece ser que esta noche les van a poner en el vuelo a Amsterdam, hoy tienen que pasar el día en el hotel y están agobiados.....
Inmediatamente informamos a los cuñados, que por su parte, han seguido con su odisea infructuosa de conseguir información por parte de atención al cliente de KLM (y por supuesto, pagando las llamadas desatendidas y colgadas a un 902). Sabiendo que los suegros están bien, salimos a ventilar nos y comer y por la tarde-noche, la BM llama de nuevo a los suegros, hablamos un rato con ellos y nos despedimos con los dedos cruzados para que mañana puedan llegar a casa.