viernes, 3 de agosto de 2012

27-07-2012 Kanding


Me levanto temprano ya que me toca la labor (como buen yerno y marido que soy) de ir a buscar el desayuno para todo el mundo. A la vuelta los encuentro en la mesa con los picos abiertos, esperando a ver que les he traido. Desayunamos, y con las panzas llenas y el cielo nublado, nos dirigimos a visitar los templos de Jinjang y Nanwu, que se encuentran a 2 y 3 km del centro, todo cuesta arriba. Mis suegros parecen mulas de carga y tardamos unas dos horas en llegar a los templos. Por el camino, pasamos por el mercado, donde mis suegros pueden ver las vacas descuartizadas y sus cabezas por el suelo. También aprovechamos para comprar fruta para comer. El primer templo, nos gusta mucho, es un instituto tibetano, muy colorido y muy bien cuidado, aunque a la suegra le parece que esta abandonado, todo porque algunas plantas salen de entre los adoquines. Se pone a llover y aprovechamos para zamparnos la fruta que nos hemos comprado en el mercado, pero como no es suficiente, vamos a la cocina del templo a ver si cae algo..... Y caer, cae, pero la sorpresa viene luego cuando nos cobran por la comida!! Hasta ahora, nunca nos habían cobrado en los templos, mis suegros son gafes!! aunque reconocemos que todo estaba muy bueno y no nos sabe mal pagar lo que nos piden. El segundo templo es menos espectacular, pero mas tibetano. No esta tan bien cuidado como el primero, pero es también bonito. De vuelta al centro (todo cuesta abajo), la suegra, la BM y yo vamos a ver el templo de Anjue, mientras el suegro se queda en un portal descansando. El templo de Anjue es muy pequeño y la visita dura 5 minutos. Como todavía es temprano, nos sentamos en la plaza del pueblo, mientras la BM intenta encontrar una tienda de fotografiá, porque su camara se ha estropeado. No hay suerte, y a media tarde regresamos hacia la guest house poco a poco, aprovechando para pasar por las calles mas comerciales. Y como mañana no quiero madrugar, compramos el desayuno por el camino. Una vez en “casa”, la BM conoce a Julio, un español que también va hacia Tagong mañana y quedamos para irnos juntos. Ducha, cena, conexión a internet, un par de partidas al Rumikub y a preparar las mochilas, que el traslado a Tagong pinta duro, ya que los precios que nos dicen en la GH son exorbitantes y en la estación de buses no venden billetes a extranjeros,, así que ya veremos como nos lo montamos.... 

Estatuas en Kangding, marcando el punto por donde pasaba el Camino de la Seda

Los suegros, sonrientes y frescos a primera hora de la manyana.

Cabezas de "yaks" en el mercado de Kanding.

Mi suegro y yo en el templo de Nanwu

Autoretrato.

Resguardandonos de la lluvia, con nuestros chubasqueros.

Templo de Jingang

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