31/07/09 De Makassar a Rantepao (Tana Toraja)

El despertados suena a las 5. Nos levantamos bien. Terminamos de hacer las mochilas y salimos a la calle en busca del pete-pet, que nos lleve a la estacion de autobuses. Encontramos rapidamente la parada y enseguida llega el pete-pete. Vuelvo a sentarme al lado del conductor. El cuadro de mandos es solo chapa, cuadros electricos y un mini-volante. Es de dia y las calles empiezan a llenarse de gente, cohes, motos, paradas ambulantes... etc. A la media hora llegamos a la estacion de buses. Nos indican des de donde salen los buses hacia Rantepao, Tana Toraja. Nos parecen demasiado nuevos y occidentalizados, asi que la BM les indica que queremos ir en el bus local y no el turistico. Despues de mas de media hora y de marearlos a todos, quedamos convencidos que es realmente el bus local y comprobamos que el resto de viajeros paga lo mismo que nosotros. El bus no sale hasta las 8 y somos los unicos turistas. Somos la atraccion del dia. Fotografio todo lo que veo, cosa que provoca mucha gracia y muchos "Hello mister". Salimos puntualmente y no llegamos a Rantepao hasta las 17 horas. El bus hace infinidades de paradas, a desayunar, comer, comprar... pero llegamos a la hora correcta. Los asientos son comodos. Lo unico es la calor, nos sentimos la mar de "limpios". El bus nos deja delante de la guest house que elegimos y empezamos la peregrinacion. Los precios no son baratos, pero tenemos claro que no volveremos a pagar lo mismo que en Macassar. Mientras peregrinamos, conocemos a Laura y Santi, que son de Tordera (pero ellos son de Tordera de toda la vida, yo solo des de hace 6 anyos...) Mientras hablamos un hombre se ofrece a llevarme a ver guest-house en su moto. Acepto, asi la peregrinacion sera mas rapida. Al final conseguimos habitacion en un hotel muy chulo. El duenyo ha aceptado mi oferta, pero sin incluir el desayuno. Aun no se cree que haya accedido a darnos la habitacion. Vuelvo a buscar a la BM y quedamos con Laura y Santi para cenar. Al llegar y ver el hotel, la BM tampoco se lo cree, pero si, finalmente nos dan las llaves y nos recuerdan que somos muy afortunados. Despues de pasar por la ducha, nos volvemos a sentir personas. Salimos en busca de Laura y Santi. Vamos a cenar y luego a tomarnos un te. Que coincidencia encontrar gente de tu mismo pueblo. Ademas Laura es profesora de uno de los colegios donde tambien trabajaba la BM. Tras la cena y el te, les acompanyamos a buscar unos billetes de bus que ya tenian reservados, pero sin fortuna, ya que la agencia esta cerrada. Nos separamos. Estamos cansados y nos vamos a dormir.