Mochileando por el Mundo: 15/08/2017 Idrija

Hoy vamos a visitar la localidad de Idrija, Patrimonio de la Unesco . Nos montamos en el coche, ponemos el gps en marcha, cogemos la autopista y nos equivocamos de salida, por lo que optamos por salir por la siguiente y llegar al pueblo por la carretera nacional, con sus curvas, subidas y bajadas, pero también con sus paisajes y sus localidades a pie de carretera.

Finalmente llegamos a Idrija y para nuestra sorpresa no nos parece ni bonito ni interesante, y una vez en la oficina de información nos enteramos que es Patrimonio de la Unesco por sus minas de mercurio, esto nos pasa por leer en diagonal.

Nos resulta interesante la idea de ver la segunda mina de mercurio mas importante del mundo, por lo que nos acercamos al centro para informarnos de horarios y precios.

Finalmente visitaremos las minas por tandas, mi suegro y yo entraremos a las 12h y la BM y su madre a las 14h, mientras nosotros hacemos la visita ellas pasearan con los perros por un paseo al lado del rio.

La visita empieza con un vídeo de 20 minutos, por suerte para mi suegro y para mi nos dan unos auriculares para que escuchemos el vídeo introductorio en español. Después nos aprovisionan de un casco y una chaqueta porque se ve que hace frio y entramos a las minas. El recorrido dura una hora y cuarto pero salimos encantados, nuestro grupo solo era de 8 personas y las explicaciones y el recorrido han estado muy bien, mi suegro y yo estamos de acuerdo que la visita a valido la pena. Una vez fuera la BM viene a buscarnos, hemos de ir a buscar a mi suegra con coche, se ha quedado con los perros esperando a que la vayamos a recoger. Sólo han recorrido medio camino porque si no, no llegaban a la visita de las 14.

El suegro y yo nos quedamos con los perros mientras la BM y la suegra marchan en coche dirección la mina.

El camino es muy agradable y fácil, es todo llano y no hay subidas ni escaleras, a más a más los árboles nos proporcionan una buena sombra. Incluso nos da tiempo de cansar al Rufo y aburrirnos en el punto de recogida acordado. Después de más de dos horas nos reencontramos con la otra mitad, comemos (o mejor dicho deb

voramos) porque el vacío de mi estomago estaba a punto de tragarme.

Tras engullir mi parte de comida, nos montamos al coche dirección Most Na Soci donde cogeremos el tren. La peculiaridad de este tren es que suben los coches y tu vas dentro de tu coche viendo el paisaje, vamos lo que toda la vida se ha llamado un tren de mercancías. Cuando llegamos a la estación, vemos una cola enorme de cohces. Nos ponemos en ella y la BM va a observar cuantas plazas quedan... Nos dice que si entramos, seremos los últimos, parece que el tren es una atracción turística de éxito. Con mucha, mucha suerte, conseguimos que nuestro coche quepa en el tren y todavía sube uno más... El resto tiene que irse por donde ha venido. Que diferente se ve todo desde dentro del coche subido en el tren, y como se nota de más el movimiento de este... Los tres cuartos de hora que dura el viaje me pasan volando y la experiencia me ha parecido increíble, aunque por las puntuaciones de los demás miembros me da la impresión que sólo lo he disfrutado yo.

Con esto ya hemos hecho el día, así que regresamos a nuestra guarida y entramos en modo rutina hasta que bajamos persianas.