Mochileando por el Mundo: 17/02/2011 Manila

sábado, 26 de febrero de 2011

17/02/2011 Manila

Son las 07h y ya estamos despiertos, desayunamos y nos enteramos que el café y te esta incluido en la tarifa ( que majos son!!!).

Hoy tenemos que conseguir llegar a la embajada de la India, la BM hace 8 meses encontró un par de billetes de avión tirados de precio. La misión no es fácil pero tampoco imposible, sobre todo por la información “detallada “ que ayer en la oficina de turismo nos dio el chico en practicas, cuando nos dijo señalando a groso modo una parte del mapa de Manila que creía que estaba por esa zona. Al final conseguimos llegar a esa zona, resulta ser un barrio adinerado totalmente vallado y con unas cuantas puertas de acceso en los cuales unos guardias muy simpáticos con pistolas y escopetas nos informan que no se puede ir andando por el barrio y debemos coger un transporte por un “módico precio”. Rápidamente hacemos cálculos y nos sale mas caro coger el transporte por el barrio adinerado que no el avión, en un solo cruce de miradas descartamos la India como próximo destino. En Manila ser rico debe ser como vivir en una prisión con una casa enorme y toda clase de lujos, con guardias en la entrada de la zona (cárcel), otros vigilando la calle ( galería), y sin olvidarnos del miedo constante por si entran en tu casa (celda) a robarte, pegarte o ….. Si fuese psicólogo haría un estudio sobre esto.

Sobre el mediodía estamos libres de cualquier obligación, y decidimos hacer lo mejor que sabemos: Trekking-Urbano. Nos perdemos por las calles de la capital, cogemos las calles al azar, fotografiamos a gente, incluso un policía interrumpe su comida para hablar con nosotros y advertirnos de los peligros de la ciudad y que vayamos con mucha cautela, cautela que ya tenemos porque llevamos las mochilas enfrente y siempre caminamos por calles transitadas pero por si las moscas dejamos de caminar por la acera y vamos por un lado del asfalto. Por la tarde volvemos a la oficina de turismo, tenemos mas suerte y no nos toca el nuevo, pero esto es todo, porque la información recibida es tan “buena” como la de ayer.

Ya de noche y quitado nuestro falso moreno repetimos la cena de ayer y justo después de cenar la BM pilla a un carterista con las manos en la masa, la victima es la BM que siendo de noche no lleva la mochila enfrente sino en la espalda y suerte tiene que el carterista es malo, la BM se da cuenta porque ha notado como le abrían la cremallera. Al girarse y quedarse cara a cara con el carterista este opta por perderse entre la multitud con lo que finalmente todo queda en un susto. Seguimos nuestro paseo ahora si con la mochila delante. Hemos de ir con mucho cuidado.