domingo, 13 de febrero de 2011

Del 7 al 12 de febrero: Bukit Lawang.

El dia de traslado se hace duro: la suegra sigue quejandose de todo: hace calor, hay curvas, no corre el aire, se marea, tiene hambre, tiene que ir al banyo y no deja de preguntar cuanto falta para llegar...
La verdad es que el viaje se hace duro: nos levantamos a las 6:30, vamos al embarcadero, cogemos el barco a Parapat y de alli un autobus a Medan que tarda 5 horas en llegar. Una vez en Medan, hemos de coger un transporte entre estaciones de autobuses: mas de una hora en un pequenyo autobus abarrotado de gente. Como no sabemos la hora a la que sale el bus a Bukit Lawang, no podemos parar a comer nada. Una vez en la otra estacion de autobuses, nos dicen que el autobus sale ya, asi que nos subimos al mismo con los estomagos vacios. Como esto es Indonesia, solo salir de la estacion de autobuses, este para para recoger gente y hasta que no se llena no salimos. En total, casi dos horas esperando. El viaje a Bukit Lawang dura 3 horas: la suegra se pasa el viaje nuevamente gimiendo....
Ya en Bukit Lawang, caminamos el quilometro que nos separa de los alojamientos y nos dirigimos al restaurante de Rita y Yusup, la pareja que el anyo pasado cuido de mi cuando estaba enfermo. Se ponen muy contentos de vernos y tras los abrazos y besos iniciales, la BM sale a buscar alojamiento. Regresa al cabo de una hora con una habitacion para 4 personas. Antes de ir hacia alli, cenamos junto con el suegro. La suegra estaba tan desesperada que ni tan solo ha podido esperar a la BM....Tenemos que cruzar el rio y la suegra sigue quejandose.... Una vez en la habitacion, nos acostamos tempranito, ya que tantas horas en la carretera nos han dejado KO.
Pasamos dos noches en el mismo alojamiento. La suegra parece que ha recaido, asi que la situacion no da para salir mucho.... Quizas la culpa ha sido del banyito que nos dimos en el rio, parece que el agua fresquita no le ha sentado bien... La segunta noche se monta una gran fiesta en la guest house. Solo deciros que a las 00:30 nos despertamos sobresaltados al ritmo de “Para bailar la bamba”. Por esta razon, decidimos buscar un nuevo alojamiento y las 3 siguientes noches las pasamos en una pequenya y preciosa guest house que solo tiene dos bungalows: uno para la BM y yo y el otro para los suegros, cada uno con una terracita, sillas y mesa de bambu... La suegra esta tan a gusto que se niega a salir de la cabanya. Ahora no solo tenemos que lavarle la ropa sino que tambien tenemos que llevarle la comida y la cena a la terraza: la pobre ha vuelto a tener fiebre por dos noches seguidas... Suerte que Rita toma de nuevo las riendas y le prepara comidas especiales para que se recupere. El dia antes de irnos, por fin, y porque ya no queda mas remedio, vamos a ver los orangutanes. Cruzar el rio con la barca provoca una taquicardia a la suegra, que pega grititos como si tuviera 2 anyos, y eso que la travesia del rio dura menos de 15 segundos!! Una vez dentro del parque Gunung Leuser y antes de ir a la zona de alimentacion, nos sorprende un orangutan que se ha colado dentro de la oficina del parque nacional y esta destrozando el tejado. Que emocionante!!! Tras este espectaculo, el guarda forestal nos indica el camino hacia el observatorio. Hay que andar unos 15 minutos, que a la suegra se le hacen interminables... La subida vale la pena: hoy aparecen 3 orangutanas con sus crias. Los suegros estan encantados y contemplan ensimismados a los orangutanes cogiendo los complementos nutritivos que les proporcionan los cuidadores del parque. Tras una hora, nos informan de que se ha acabado el tiempo, asi que con mas pena que alegria emprendemos el camino de regreso, cruzamos nuevamente el rio y de camino a nuestra guest house, observamos monos con cresta blanca. Antes de comer, arrrastamos a la suegra hasta la cueva de los murcielagos, que esta a dos quilometros. La verdad es que podriamos haberle ahorrado el viaje, ya que una vez alli, el ascenso a la cueva es impracticable para ella y  ademas, la cueva carece de gran interes. El resto del dia , lo pasamos descansando, banyandonos en el rio y jugando a las cartas.

A la hora de la cena, quedamos con Rita y Yusuf, nuestros protectores para manyana por la manyana, ya que tienen a su hija estudiando en Kuala Lumpur y nos ofrecemos a llevar un paquete de comida para ella.
Despues de una copiosa cena, volvemos a nuestro alojamiento a recoger maletas, que manyana nuevamente toca traslado y vuelta a Malasia.
Cogiendo cabritas

Jugando a carta delante de nuestros bungalow

Orangutan con su cria.

Foto familiar con Rita y Yussuf

 

1 comentario:

VIAJANDO E PULANDO dijo...

adorei seu blog fantastico parabens