Del 19-02 al 21-02-2013 Sabang

Los dos primeros días que pasamos en Sabang, los pasamos bajo la lluvia, suerte que finalmente elegimos la GH de la BM que tiene una amplia zona comunitaria cubierta con hamacas y café gratuito, donde nos pasamos la mayor parte del día. A la luz del día, el lugar gana muchos puntos, ya que a parte de ser agradable, es tranquilo y con bonitas vistas a un lago, donde suelen venir diferentes especies de aves a pescar y refrescarse. Solo cuando la lluvia cesa y/o el estomago nos aprieta, salimos de la GH, aunque a partir del segundo día, las cenas decidimos preparárnoslas también nosotros, ya que hay cocina para el uso de los huéspedes y salvando un lugar donde nos han servido buena comida, el resto son caros y las raciones escasas.... incluso mi suegro que es “”un gran comedor” tiene que pedirse una ración extra de pescado ya que si no, solo le entraba el aroma. También cuando el tiempo lo permite, paseamos un poco a orillas del mar y por la calle del pueblo, pero no nos podemos bañar porque el agua esta muy agitada y hace mucho viento. El tercer, que es cuando supuestamente deberíamos visitar la cueva, recibimos la grata noticia de que se ha cancelado la salida de barcas y que la cueva esta cerrada. Hay amenaza de tifon y no quieren correr riesgos. Tras insistir mucho, nos dan hora para mañana, hecho que nos complica un poco el viaje porque la BM y la suegra tenían pensado pasar el día de compras en Puerto Princesa. Curiosamente es el día mas soleado de los 3 que llevamos en Sabang y nos pasamos toda la tarde bañandonos, tomando el sol y jugando a cartas en la playa. Por la noche, a BM nos vuelve a preparar una cena deliciosa u antes de acostarnos, preparamos las mochilas y lo dejamos todo listo para hacer el check-out tan pronto como terminemos la visita mañana.

En el paseo de la playa, hay un oso-gato, que hace las delicias al suegro.

Es un animal muy simpatico y tranquilo.

Terraza de nuestra guest house, con su hamaca y sus vistas.

Aguas revueltas de la playa de Sabang.

Una de las cenas que nos prepara la BM.