23-05-2012 De Mati Si a Zhangye

Hemos descansado muy bien y a las 07h estamos despiertos, desayunamos y hacemos las mochilas (no tenemos claro si hoy nos quedaremos o cogeremos el bus de vuelta de las 16h o las 17h y como el hotel esta vacío, seguro que tenemos habitación).
El frío no cesa, pero esto no mengua nuestras ganas de caminar, las vistas bien lo valen... primero vemos un río congelado y ni cortos ni perezosos nos ponemos a caminar por encima del río como si fuésemos unos profetas en busca de sus discípulos. Disfrutamos como niños, hace años que no veíamos ni tocábamos la nieve... Cuando ya nos hemos cansado de jugar y divertirnos en el río seguimos nuestra caminata. Esta parte no es nada fácil, porque todo es cuesta arriba y el camino esta mal señalizado, por lo que terminamos perdiéndonos y encontrándonos constantemente. Por el camino la BM ve 2 perdices y yo, como siempre, no veo nada de nada... pero 10 minutos mas tarde veo un ciervo y me pongo mas contento que unas pascuas, que suerte la mía! por no ver nunca un animal salvaje, hoy he visto un ciervo, estoy que me salgo de alegría!. Cuando ya estamos casi llegando a la cima de la montaña, se nos pone a llover y cuando ya casi estamos arriba, la lluvia se transforma en nieve y la verdad es que no nos hace ni pizca de gracia, porque de momento no cuaja, pero en el momento que empiece a cuajar ya veremos como nos las arreglamos para bajar la montaña y volver al hotel. Con todo esto vemos unas jacks (vacas peludas) enormes y muy bonitos y visto como nieva y aun no cuaja (gracias a Dios) empezamos el descenso rapidito. En el descenso nos sucede lo mismo que en el ascenso, perdemos y encontramos el camino constantemente, por suerte llegamos a zona segura sanos y cansados y dando gracias a nuestro buen karma que la nieve no halla cuajado. Al ser hora de comer, cansados y mojados como estamos ni nos lo pensamos en tomarnos una enorme y calentita sopa. Mientras esperamos que nos sirvan, aparece el dueño del hotel y nos comunica que hoy los buses no suben hasta el parque porque llueve y hemos de coger un taxi hasta el cruce (que esta a 8,5 km) para coger el bus hasta Zhangye. Ni nos inmutamos, seguimos esperando que nos traigan nuestras sopas mientras vemos llover, comemos y una vez llenados los estómagos y calentitos decidimos cargarnos nuestras mochilas y salvar los 8'5km hasta el cruce a pie, no nos importa el aguacero que nos esta cayendo, pero por algo tenemos ya las piernas duras de tanto caminar.... El camino es bastante fácil, y a mas a mas tiene una ligera pendiente descendiente. Yo por si las moscas cada vez que oigo acercarse por la espalda un coche hago autostop, pero hasta pasados 5 km no para ningún coche. Por fortuna para nosotros, este también va hasta Zhangye y en menos de una hora volvemos a estar en el mismo hotel que hace 2 días, vaya chollo.
Son las 16h, tenemos toda la tarde por delante, merendamos y vamos al mercado para ver si podemos comprar unas zapatillas chinas para la BM, porque las Nike traídas de España están destrozadas. Al final y rompiendo pronósticos la BM se compra un calzado nuevo, las mismas zapatillas que se compro hace dos años, pero como la inflación va como va en este país, este año le cuestan mas del doble de precio.
Cansados como estamos por todo el día, nos retiramos a nuestro aposento, que aun nos queda realizar el ritual de la palangana, que no es poco.

No todos los dias hacemos cosas como esta.

La experiencia de andar sobre el rio congelado, es algo que no habiamos experimentado antes, asi que disfrutamosde la novedad.

Como siempre que hacemos algo nuevo, nos lo pasamos bien haciendo el ganso.

No nos esperabamos la nevada que nos cayo encima... pero reconocemos que las vistas con la nieve cayendo eran espectaculares

El camino de descenso, lo hacemos tan rapido como podemos, que no es decir mucho.

Y una vez en el pueblo, nos sentimos aliviados de haber encontrado el camino de regreso.