El resto de la noche no ha ido tan mal. Un par de veces me he despertado con una cucaracha corriendo por mi pierna y la calor ha permitido que mi cuerpo no dejase de transpirar en toda la noche... En cuanto se ha hecho de dia (digase las 5'30) la gente se ha despertado y han puesto musica para todo el mundo, por lo que no nos queda otro remedio que levantarnos, asearnos y subir a cubierta, donde pasamos el resto del trayecto, aburridos, acalorados y con muchas ganas de llegar... Nuestras ganas son tantas, que casi nos bajamos en otro puerto, suerte que la gente nos avisa, aunque se lo pasan pipa a nuestra costa...
A las 17'30 llegamos a Ende. Somos los primeros en abandonar el barco. Queremos ir a la estacion de buses para coger uno a Moni, asi que preguntamos el precio para el trayecto y nos sueltan de nuevo una barbaridad. Como hoy no hemos hecho ejercicio, nos echamos a la calle a andar. Cruzamos por medio de la pista de aterrizaje de Ende, que parece mas una pista social: ninyos jugando, hombres y mujeres hablando por todas partes, y por supuesto, animales. Tras preguntar a varias personas y obtener siempre la misma respuesta (que hoy ya no hay buses hasta Moni) decidimos buscar alojamiento. Encontramos uno rapidamente, donde nos aseamos y salimos a cenar. Despues encontramos un cibercafe. Nos conectamos un rato, pero el suenyo y el cansacio nos vence y, a pesar de que la conexion es rapida, nos retiramos a dormir, que manyana hemos de volver a madrugar.
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