16/09/2019 Valparaíso

Hoy ganduleamos un poco, por no decir mucho, nos levantamos más tarde de lo previsto, pero sin pasarnos. Una vez en la calle y aprovechando que hoy es lunes vamos a la oficina de turismo, que para nuestra sorpresa hay seis personas trabajando, eso sí, sólo en horario de funcionario, no sea cosa que una oficina de turismo abra los fines de semana que es cuando hay más turismo.

La información que sacamos es más bien confusa y parece que sepamos más nosotros que la persona que nos atiende, claramente tenemos la sensación de perdida de tiempo.

Como mañana tenemos intención de ir al Parque Nacional de la Campaña, le pedimos toda la información disponible, por desgracia no tienen nada ( me hago cruces del mal servicio que esta dando esta oficina). La chica nos envía a la oficina de SERNATUR. Salimos de la oficina de turismo más desinformados que otra cosa pero con la esperanza que en la otra oficina nos den toda la información disponible y de una forma clara. Pero claro nuestras expectativas son muy altas, aquí nos atiende una mujer que lo único que hace es buscar en San Google y leernos la información, pero tras decirle que esto ya lo hemos leído nosotros y dejarnos bien clarito que no tiene ni idea decide llamar al parque y pasarnos el teléfono para que nosotros hagamos todas las preguntas y dudas que tengamos.

Al final los dejamos por incompetentes, mañana ya nos espabilaremos, como siempre hacemos y ya veremos como va el día, hoy ya estamos cansados de tanto oír hablar y no decir nada.

Decidimos ir a ver los leones marinos, primero en el espigón de hormigón que hay cerca de la estación de tren y después caminar todo el paseo hasta la playa donde se encuentran tomando el sol. En la playa resulta muy espectacular porque los vemos de cerca, aunque hemos de tener cuidado de no acercarnos mucho porque son muy territoriales. Ver a estos enormes animales en libertad es increíble, no contábamos que los pudiéramos ver en este viaje.

Ya bien tarde regresamos por el paseo que hay al lado del mar, nos notamos las pieles calientes, seguro que nos hemos quemado con tanto sol. De camino al centro paramos en un puesto a comernos un frankfurt local (aquí le llaman “italiano completo”), que lleva infinidad de cosas y esta muy bueno.

Una vez de regreso a nuestra habitación volvemos a nuestra rutina y nos preparamos para mañana, al final hemos decidido ir al parque.

Sin más , nos vamos a dormir que mañana sera otro día.