Mochileando por el Mundo: 17/09/2019 Valparaíso ( Parque Nacional de la Campaña)

A las 06h suena el despertador y la BM me lleva a golpe de pito, vaya estrés. Al final decidimos ir en tren, así que bajamos la interminable escalinata, caminamos muy ligeros hasta la estación de tren y aún con aliento la BM pide los billetes para ir al parque, a lo cual la mujer nos responde que es mejor ir es bus y más rápido, que ella fue hace poco y nos lo recomienda ( es increíble, a cada persona que se le pregunta por la misma información nos dan respuestas diferentes, es de locos). Al final decidimos hacerle caso y cruzar la calle para coger el autobús, digo autobús porque el chasis es de bus pero a la velocidad que va parece que sea de carro. Por momentos creemos que no llegaremos, hemos de estar en la entrada del parque antes de las 09:30h sino no nos dejaran entrar. Rompiendo todo pronostico llegamos a Limoche y hacemos un cambio de bus que nos lleva hasta el parque. Llegamos justo a tiempo.

El trekking son sólo 7 km y un desnivel 1.933m, son unas cuatro horas y media de subida hasta la cima, pero hemos de llegar al control de los 5 km antes de las 12h, sino el guardia no nos deja seguir por falta de tiempo.

Subimos a una media de 1 km cada media hora, y como hay mucha niebla no podemos ver las vistas panorámicas que nos prometieron. Yo lo llevo bien pero a la BM le cuesta, pero no afloja. También ayuda que no vamos solos, hay un grupo escolar, algunas parejas y alguna mama, todo esto hace que la BM vaya subiendo, aunque por momentos crea que no lo vaya a conseguir. A las 11:40h llegamos al km 5 de la ascensión. Nos tomamos unos 5 minutos de descanso y empezamos el ascenso, sólo son dos kilómetros, pero esta marcado que se tarda dos horas. Y vaya si es subida, los 5 km anteriores han sido un paseo, aquí hay puntos que vamos a cuatro patas de la inclinación que hay. Pero después del km seis dejamos las nubes a nuestros pies, viendo sólo alguna montaña que sobresale y a lo lejos los andes. El último km es muy duro, incluso dejamos a una pareja atrás (decidieron dar media vuelta). Casi arriba vemos a un zorro, que no debe tenernos miedo porque se nos acerca mucho, y finalmente llegamos arriba, la BM lo a conseguido y las vistas bien lo valen, estamos por encima de las nubes y la sensación es increíble.

Aprovechamos para llenar los depósitos, disfrutar de las vistas y sobre las 14:30h empezamos el descenso. Aquí quien sufrirá seré yo y mis rodillas. La bajada es tan lenta como la subida, y en muchos tramos volvemos a las cuatro patas.

Para mi sorpresa la BM no va sobrada, y yo por supuesto tampoco, mis rodillas lo están viviendo en intensidad. A las 16:30h pasamos por el control del guardia, y a partir de aquí, seguimos el descenso al mismo ritmo que la subida, a kilómetro cada media hora.

A la BM se le hace interminable, y yo no voy mejor, lo único bueno es que las nubes han desaparecido y podemos contemplar las vistas prometidas, pero ni aún así esto consuela a la BM.

A las 18:30h estamos saliendo del parque, pero aún nos falta el kilómetro para coger el bus. Llegamos a la parada, nos subimos en él hacemos el transbordo correspondiente y a las 21h llegamos a Valparaíso. Como no podemos ni con nuestra alma, nos compramos un par de pinchos de carne para cenar, perdón yo me tomo dos, y como podemos volvemos a nuestra guarida, pasando por las 300 y pico escaleras que a estas horas parecen 3000.

Una buena ducha, un café calentito y nos vamos a dormir, que hoy hemos dado el do de pecho.