28/04/2010 Berastagi

La pega de dormir cerca de una mezquita es que a las 5h de la mañana te despiertan las oraciones matinales, y aunque solo duran 10 minutos parece que duren 1 hora. A las 6h estamos en pie. Queremos llegar hasta la cima del volcán Sibayak, y por lo que hemos leído hay gente que se ha perdido por el camino. Caminamos hasta la base del volcán, donde un hombre muy simpático nos invita a pasar por la taquilla, una vez pasado el trance, solo hemos de seguir una carretera asfaltada, muy ancha y sin perdida, me pregunto quien ha podido perderse por este camino. Los 2 últimos kilómetros son por camino de tierra, pero muy bien indicado. Las vistas por el camino y a estas alturas son sublimes, se palpa el azufre en el ambiente, hay varios orificios que expulsan vapor todo el tiempo. Subimos hasta la cima del volcán, desde donde se tienen las mejores vistas y aprovechamos para rellenar nuestros pulmones de oxigeno y nuestra barriga de alimentos. Tras un buen rato seguimos explorando el cráter del volcán y ya cansados decidimos bajar por la otra cara, según la guía hay unas escaleras, pero no las encontramos hasta que no hemos bajado medio volcán. El camino no es nada fácil y tenemos suerte que no llueve ni ha llovido, sino seria impracticable. La bajada se nos hace larga y dura, cuando ya creemos que hemos llegado vemos otra empinada bajada. Cansados y desesperados terminamos el descenso, y nada mejor para relajarse que tomarnos un banyo en las primeras aguas termales que encontramos, desde las cuales vemos el volcán Sibayak. Con las pieles bien calentitas y arrugadas continuamos el día, nuestro siguiente destino es la aldea Pecerel, también con casas típicas de la región... Los primeros kilómetros hasta la aldea los hacemos a pie pero como vemos que tardaremos mas de la cuenta terminamos subiéndonos a un opelet. Visitamos el pueblo que no nos parece muy interesante, aunque vemos otra boda, los novios están serios como si se tratara de un funeral. Y sin mas que hacer regresamos a pie hasta Berastagi, solo nos lleva 1 hora. Con el descenso y los banyos termales estamos muertos de hambre, paramos en el primer puesto que vemos y nos compramos un pancake de queso (una barra de pan de molde abierta en tres partes rellena de queso y tostada con kilos de mantequilla). Buscamos información para mañana, queremos visitar otro volcán, pero este es mas difícil y se tarda 4 horas en subir mas otras 4 horas en bajar. Vamos a otra guesthouse a mirar la información y una buena señora nos ofrece te gratis a cambio de conversar con sus alumnos durante una hora, son estudiantes de ingles. Al final nos estamos un par de horas hablando, y nosotros que queríamos aprovechar la tarde...! Pero al menos hemos conseguido la información. Paseamos un poco por el pueblo, cenamos y regresamos a nuestra guesthouse, para primero pasar por el mandi ( el agua esta congelada) y segundo para estirarnos en la cama hasta que se nos cierran los ojos.