Hay
que reconocer que en esta cama uno duerme como un lirón, que placer
y que manera de cargar las baterías. Volvemos a levantarnos sobre
las 07h, salimos a desayunar en el mismo puesto de ayer, un café con
pastas y sobre las 08h nos ponemos en marcha, hoy es día de
trekking, pero del bueno, según las indicaciones tenemos 17 km de
ida más la vuelta...Como no queremos que nos coja las noche
emprendemos la marcha a buen ritmo, la primera población se llama
Ivony a 9 km, pero la pista de tierra que seguimos hace que no
tengamos perdida. Primero empezamos con unos cuantos km de subida,
que a la hora de volver nos irán muy bien, y los últimos km son
cuesta abajo. Las vistas son increíbles, las laderas de las montañas
están llenas de cascadas de arrozales, pero no es hasta cuando
llegamos a la población que vemos el increíble y enorme anfiteatro
de cascadas de arrozales, nos quedamos sorprendidos de tanta belleza.
Aprovechamos también para tomarnos una sopa, hemos de reponer
fuerzas y no sabemos cuando volveremos a comer. Pasados los
anfiteatros nos ponemos en marcha, nuestra próxima parada es Andina
a unos 8 km. La calidad de las vistas ha bajado, difícilmente se
podía seguir manteniendo el nivel. Llegamos a destino, y nos
sentamos un buen rato a descansar y contemplar las vistas que en este
punto son espectaculares. Como el tiempo nos apremia, decidimos
caminar un poco por medio de los arrozales y sobre las 13h
emprendemos la vuelta. El tiempo que nos hace es muy bueno, demasiado
para nuestro gusto y nuestro caminar ya no es ligero como en la ida,
aún así mantenemos un buen ritmo. Al pasar por Andina ralentizamos
nuestro paso e incluso nos regalamos un descanso en un lugar
privilegiado desde donde vemos todo el el anfiteatro de arrozales.
Tras el espectáculo volvemos al mismo puesto que en la ida para
tomarnos otra sopa y una naranja cada uno, La señora cuando nos
vamos nos regala una naranja, que gustosamente nos repartimos.
Seguimos con la vuelta y esta parte es cuesta arriba y con la barriga
llena nos cuesta bastante, pero por fin llega la larga cuesta abajo,
donde volvemos a coger ritmo, y sobre las 16:30h llegamos a la
ciudad. Aprovechando que aun nos queda luz, nos informamos sobre el
bus que hemos de coger mañana (precios y horarios) y con los deberes
hechos, las piernas flojas y la barriga vacía, nos volvemos al hotel
a despojarnos de la suciedad. Volviendo a ser personas salimos a
cenar, nos tomamos un café y volvemos al hotel para actualizar el
blog, chatear con la familia y preparar las mochilas para mañana.
|
Mujeres yendo hacia el mercado. |
|
Algunas llevan barbaridades sobre su cabeza, pero aún así tienen tiempo de sonreir y pararse para que las pueda fotografiar. |
|
Hay gente más afortunada, que tiene cebús y puede usarlos para transportar sus mercancías. |
|
La BM disfrutando de los arrozales |
|
El paisaje es muy similar a muchos del sud-este asiático, pero no por ello deja de ser impresionante. |
|
Completos anfiteatros de arroz. |
|
TAmbién tenemos un poco de aventura en nuestro paseo |
|
LA verdad es que cuando esté saliendo el arroz, este paisaje todavía será mejor. |
|
Casa malgache. |
|
Más vistas a los arrozales |
|
Intento fotografiarlo todo. |
|
Aunque parezca mentira, la sopa de fideos es el plato más popular y lo encontramos en cualquier lugar. |
|
Niña malgache |
|
Pese a todo, buena cara y muchos saludos. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario