viernes, 15 de julio de 2016

14/07/2016 de Manakara a Fianarantsoa

05:45h suena el despertador, con los ojos medios cerrados terminamos de hacer las mochilas. Justo cuando salimos por la puerta de la habitación oímos llover, y no precisamente una lluvia suave, no nos queda otra que ponernos los impermeables, pero la estación de buses la tenemos a un kilómetro y medio con lo que tenemos garantizado llegar empapados... y efectivamente así ocurre, como también sucede que sólo llegar y comprar los billetes la lluvia desaparece.
Los billetes que hemos comprado son hasta la reserva natural Ranomafana, pero si hace mal tiempo seguiremos hasta Fianarantsoa, total el coste es el mismo. No queremos hacer parada en la reserva si llueve, no podríamos ver nada y sólo nos costaría tiempo y dinero.
El conductor sigue las políticas del país, cuanto más rápido mejor, pero se olvida de los pasajeros, que a la mayoría se nos ha cambiado el color de la cara, estamos más blancos y pálidos que morenos o rosados. Sólo nos da descanso cuando para en los muchos controles policiales o en la parada marcada para comer.
Cuando nos acercamos a la reserva el conductor nos pregunta si para o continua, pero la lluvia, el cielo encapotado y la niebla hace que decidamos por unanimidad que continue hasta Fianarantsoa. Pero la conducción del conductor y la carretera bacheada y sin apenas rectas hace que la B.M y yo estemos al borde de coger una bolsa de plástico y vaciar nuestros estómagos... afortunadamente conseguimos llegar sin hacer uso de la bolsita.
Una vez puestos los dos pies en el suelo nos cargamos las mochilas y nos alojamos en un hotel que esta a 200 metros de la estación de buses con todos los servicios y más económico que la última vez.
Son las 14:30h y ya estamos instalados, decidimos estirar las piernas yendo a visitar la parte alta de la ciudad que es la única parte que no hemos visto. Y que pena que no haberla visitado antes, porque desde luego el rinconcito vale la pena, por no hablar de las vistas que son sublimes. Antes que anochezca volvemos a nuestro hotel, pero de camino cogemos lluvia, viento y frío, todos los ingredientes necesarios para que la B.M empeore. Cuando pasamos por delante de la estación de buses nos hacemos con los billetes para mañana ir a Ranohira y echarle un ojo al Parque Nacional de Isalo.

Una vez en la habitación volvemos a nuestra rutina y nos preparamos para mañana.

Nuestro bus de hoy

Parte alta de Fianantsoa

Parte alta Fianantsoa

Vistas des de la parte alta de la ciudad

La BM y las vistas

Tomándonos un café


Intentando sacarme de encima a todos los "estudiantes"

Parte alta.

No hay comentarios: