El madrugón de hoy ha sido de los que pasan a la historia. A las 04:15h nos hemos levantado, todo porque a la dirección del orfanato les hace "mucha ilusión" que les acompañemos a un evento que organiza la televisión, y como no sabemos decir que no, nos ha tocado madrugar.
A las 5:30h estamos en el orfanato. Todos los niños están vestidos con sus mejores galas, muy despiertos y super-activos, no como la BM y yo que nos caemos de sueño. A las 06h estamos subidos en la parte de atrás de una furgoneta, incluso llevamos un cartel que anuncia nuestro orfanato. El trayecto solo dura 10 minutos y somos los primeros en llegar al recinto, por todas las mesas y sillas que veo diría que no estaremos solos, aunque tampoco entiendo tanto madrugon. Tras nosotros llegan los demás grupos y se van colocando donde les señalan, y hasta las 08:30h no empieza el verdadero infierno, digo infierno porque desde las 04:30h no hemos comido nada y los niños que hay en el evento están muertos de hambre, sed y sobre todo aburrimiento, porque gracias a los políticos el día internacional del niño se convierte en el día internacional del político: desde las 08:30h hasta las 12:30h se han ido pasando los micrófonos unos a otros sin impórtales las caras de aburrimiento de los crios. Seguro que será un día que no olvidaran...
Terminada la charla por fin viene la comida y bebida. Pero antes de que podamos empezar a comer, tenemos nuevamente que esperar a que los politicos se tomen las fotos pertinentes mesa por mesa, haciendo ver que sirven la comida a los huerfanos. Tras la comida por fin empiezan los espectáculos: Danzas, karate, helados gratis...etc. pero nos quedamos sin saber que es el etc porque la directora decide volver al orfanato para seguir la rutina de cada día. La cara de los niños es todo un poema, justo cuando la BM era la siguiente en la cola para recoger helados para todos ellos, la directora decide que es hora de irse, y ni siquiera espera a que los niños tengan sus helados… Pero el colmo de los colmos que una vez en el orfanato la directora y el subdirector se van a dormir la siesta, los pobrecitos no aguantaban mas, mientras los niños se encierran en la habitacion de la cocinera a ver el resto de la fiesta por la tele.. El resto del día no hay ninguna novedad, ni buena ni mala afortunadamente porque la BM y yo somos dos volcanes a punto de explotar.
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