sábado, 18 de junio de 2011

04-06-2011 El vaso esta casi lleno…

Estamos calentitos calentitos... no porque haga calor, que lo hace sin perdón, sino por las nuevas que nos van llegando.
Los últimos 3 días han sido una espiral hacia abajo, por no decir una caída libre. El jueves Javier vino al orfanato para ayudarnos con el proyecto de las camisetas. Nos pasamos toda la tarde practicando con los niños diferentes dibujos y explorando su vena artística. Pero pese a que la directora esta informada de nuestro proyecto la vemos encargar 300 camisetas del modelo antiguo. Cuando le preguntamos porque no se espera a que tengamos la camiseta diseñada nos contesta que a los turistas les gusta mas el modelo antiguo ( todo esto sin ver el modelo nuevo) es decir, estamos perdiendo el tiempo y no le interesan para nada nuestros proyectos.
Esa misma noche la BM y yo caemos enfermos, la BM diarrea con fiebre y yo un resfriado de manera que ni siquiera podemos ir a la despedida de Virginia que se va al día siguiente.
El viernes  pasamos todo el día en la cama, igual que el sábado, día en que salimos de casa solo para cenar. El azar quiere que nos encontremos con Angie y Thomas que han estado yendo estos días al orfanato porque tenían la posibilidad de, a través de sus contactos, reunir el dinero necesario para ayudarles a comprar las tierras. Pero para ello primero querían asegurarse de que el orfanato tiene las cuentas claras y transparentes. Su impresión a sido totalmente negativa, sin ir mas lejos se han llevado a la directora de compras informándola que disponían de un presupuesto de 200$ y a esta no se le ocurre otra cosa que comprar dos téjanos y dos camisetas “channel” y tela de la mejor calidad para que el sastre haga los vestidos para algunos de los niños. En ningún momento han regateado los precios ( estamos en Camboya y aquí se regatea hasta el aire que respiras) ni han mostrado ningún cuidado en comprar cosas mas útiles , funcionales y económicas para el orfanato. Además cuando ya han llegado a los 200$ les han presionado para comprar mas chorradas inútiles. Angie y Thomas les han preguntado porque llevan la tela al sastre si supuestamente en el orfanato se enseña a coser a las chicas, pregunta a la que no han sabido responder (es decir, en realidad no hacen clase de costura en el orfanato, como nosaotras ya bien sabemos). También tienen la sospecha, igual que nosotros la tenemos que los dos niños pequeños son hijos de la cocinera y su marido, mas que nada porque el parecido es escandalosamente visible ( los niños parecen una fotocopia reducida del “padre”), por estas razones Angie y Thomas tienen claro, que el orfanato no es transparente ni eficiente, que mas o menos es la misma conclusión que hemos llegado nosotros en estos 3 días de “retiro y deliberación”.

Después de la cena nos vamos todos a tomar algo con Javier, porque mañana se va de Siem Reap.
Javier no ha necesitado tanto tiempo como el resto para llegar a las mismas conclusiones, con solo una tarde en el orfanato pudo ver las turbulencias de este. 


La Bm al frente. Angie, Thomas y yo al fondo


De izquierda a derecha: Javier, yo, Thomas y Angie


La BM y yo decidimos darnos unos días mas antes de tomar ninguna decisión.

No hay comentarios: