Nos levantamos temprano, nos cargamos la mochila y vamos a buscar la moto que reservamos ayer. La senyora que nos alquila la moto, nos guarda las mochilas. Como estamos en la frontera con Birmania, toda la zona es muy montanyosa, verde y bastante virgen, asi que el dia en moto nos resulta impresionante.
Intentamos visitar un campo de refugiados birmanos que esta a 90 km. En el hotel, uno de los hombres que ha vivido en este campo, nos da su foto y nombre para que podamos hacer ver a los guardias que vamos a visitar a un conocido. Cuando llegamos al campo, tenemos la impresion de que es como estar en la carcel, en regimen de tercer grado. No nos dejan entrar, ya que necesitamos un permiso especial de las autoridades para hacerlo. Se ofrecen a ir a buscar a nuestro "amigo", pero al hacerlo nos dicen que ya no vive alli. Nos mostramos "sorprendidos" y nos resignamos. Que rabia!! Nos hacia mucha ilusion poder ver el campo de refugiados, hablar con la gente y sacar fotografias!!! Pero las ametralladoras nos aconsejan que cojamos la moto y continuemos circulando.
De vuelta a Mae Sot, disfrutamos de los paisajes y visitamos unas cascadas de agua que nos encantan. A media tarde, me vuelvo a encontrar mal, y para postres se nos pone a llover, solo unos kilometros, pero los suficientes para mojarnos y coger frio. Antes de devolver la moto llevo a la BM y todas las mochilas a la estacion de buses. Esta vez es la gente local la que se nos queda mirando como hacemos malabarismos con la moto y se aparta de nuestro camino!
Yo me quedo en la estacion de buses (no aguanto mas) mientras la BM devuelve la moto y regresa. Al subirnos al bus, hay el doble de pasajeros que de asientos. Han duplicado los billetes y sobra gente, algunas personas deben quedarse en tierra y esperar al bus de manyana. La BM y yo nos hacemos los suecos, ya que tenemos que llegar a Bangkok manyana para recoger a los suegros y si perdemos este bus ya no llegamos. La gente local pide que nos bajemos nosotros pero les hacemos creer que vamos a coger un avion. Finalmente, nos permiten seguir en el bus (ufffffffff....) y pasamos la noche en el hasta Bangkok.
